Mons. Moon: 'En el matrimonio, ponerse siempre de acuerdo, ceder, aceptar'

  • 10 de octubre, 2024
  • Venado Tuerto (Santa Fe) (AICA)
El obispo de Venado Tuerto invitó a rezar por las parejas y matrimonios que están en conflicto, y recordó que Dios "sostiene ese amor del uno para el otro".

El obispo de Venado Tuerto, monseñor Han Lim Moon, celebró la misa del domingo 6 de octubre, 27° del tiempo durante el año.

A la luz de las lecturas bíblicas de ese día, recordó que, "con dolor, muchas veces constatamos la separación de una pareja, la rotura de una familia. Es muy frecuente, y sufrimos nosotros también".

"Jesús, cuando los fariseos plantearon la cuestión del divorcio, les recordó que el plano original de Dios sobre el hombre es crearlo varón y mujer, y los dos serán 'una sola carne'. Es necesario aclarar un poco la palabra 'carne', que no es solamente a nivel corporal, sino que en la Biblia significa el hombre completo, integral, en su alma, cuerpo y corazón. Todo está expresado en la carne", continuó el prelado.

"Y después -dijo- cuando dice Jesús 'una sola carne', eso significa que el varón y la mujer se unen, por el amor, y forman una sola unidad, pero sin que desaparezca el 'tú y el yo'. Cada uno mantiene su identidad, su originalidad, aunque, sin embargo, se forma un 'nosotros'. Esta unidad se realiza en concreto a través de la complementariedad entre varón y mujer".

"Esa unidad es tan fuerte que, cuando se separa un matrimonio, se divorcia, es como partir algo a la mitad. Para que esto no suceda, formando comunión y unidad, Dios nos da su auxilio, que es el sacramento del matrimonio", enfatizó.

Mons. Moon aclaró también: "Ahora, ¿qué pasa con las personas que ya se habían casado y fracasaron en su primer matrimonio, y formaron una segunda o tercera unión? El Papa Benedicto XVI recordó en un documento que, cuando esto sucede, no por esa razón están excomulgados, no dejan de ser hijos de Dios y de la Iglesia. También, el Papa Francisco señala que tenemos que acompañar a esos matrimonios y parejas con dificultades, ayudarlos a discernir, integrarlos a la comunidad en su fragilidad, aceptarlos y acogerlos".

Y señaló que, en estos tiempos, "muchos jóvenes no se casan, quizá porque no valoran el sacramento del matrimonio o no valoran ese auxilio de Dios. Uno se pregunta: ¿es posible a amar a alguien para toda la vida?. Uno dice que sí, con la ayuda de Dios, porque ese es el plano original de Dios y por eso Él sostiene el amor de uno para el otro. Sin Dios, es casi imposible". 

Además, aclaró que "no hay que olvidarse en el matrimonio de que siempre hay que ponerse de acuerdo, ceder, cincuenta y cincuenta. La aceptación mutua, que no es tan fácil como comprender al otro por completo, sino que se acepta por el amor. Hay cosas que hay que aceptar, aunque a veces sin comprenderlo demasiado. No hay que cambiar al otro". 

Finalmente, pidió "recordar en esta misa a todas aquellas parejas y matrimonios que están en conflicto. Rezamos por todas estas familias y, si andamos bien, seguimos adelante con este consejo y esta Buena Noticia del Evangelio de hoy".+