Mons. Martín invita a profundizar nuestro vínculo con Dios en esta Cuaresma

  • 23 de febrero, 2023
  • Rosario (Santa Fe) (AICA)
El arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Eliseo Martín, difundió a la comunidad arquidiocesana su mensaje de Cuaresma, alentando a vivir este tiempo de la mano de María.

“La Cuaresma es el tiempo más propicio para profundizar nuestro vínculo con Dios”. Con esas palabras comenzó monseñor Eduardo Eliseo Martín, arzobispo de Rosario, el mensaje dirigido a la comunidad diocesana este Miércoles de Ceniza.

“Es el tiempo favorable para convertirnos más a su Presencia. Es el tiempo para dejarnos arrebatar por la belleza de Cristo, por su ternura, su compasión, y atraídos por su belleza podamos experimentar el cambio de vida obrado por el encuentro con el Señor”, enumeró el prelado, indicando que, a su vez, este tiempo litúrgico “nos hace tomar conciencia de que pertenecemos al Pueblo santo de Dios caminado juntos hacia el destino, que en este tiempo cuaresmal se dirige a su renacimiento”.

Haciendo referencia al contexto actual de la ciudad y de la región, “tan surcado por la violencia, la inseguridad, las adicciones, el derramamiento de sangre”, el arzobispo invitó a los fieles a ponerse en “camino de conversión” de la mano de María, “para que el Señor vaya haciendo su obra de transformación en todos y cada uno de nosotros, nos pacifique y nos haga misioneros de la paz, trabajadores de la paz y ser así llamados hijos de Dios”.

En ese sentido, invitó a la comunidad a emprender un camino de Fe. “La cuaresma es un camino para purificar nuestra Fe. María cree que nada es imposible para Dios. También nosotros somos invitados en esta cuaresma a creer que Dios puede cambiar nuestra vida, aunque está llena de miserias, aunque hayamos cometido muchos pecados, aunque arrastremos vicios inveterados”.

También animó a iniciar un camino de amor, de caridad. “María nos ayuda a vivir en esta cuaresma de un modo más intenso las obras de misericordia, que nos liberan del individualismo, del egoísmo que nos encierra en nosotros mismos como en una tumba. Obras que nos abren al bien de nuestros hermanos. Teniendo también la certeza que las obras de caridad cubren la multitud de nuestros pecados”, reflexionó.

Por último, monseñor Martín mencionó que “María nos ayuda en esta cuaresma a realizar nuestro camino penitencial”. “En María, la penitencia era aceptar las circunstancias dolorosas de su vida, no como remedio de los pecados sino como instrumentos para su maduración en el seguimiento de su Hijo”, indicó, y destacó que “María vivió en una continua negación de sí misma para hacer la voluntad de Dios”.

“¡Que ayuda preciosa para nuestro camino penitencial! Para nuestro camino de purificación hacia la Pascua”, expresó el arzobispo. “La Santísima Virgen ha vivido este carácter penitencial de modo ejemplar y nos ayuda a vivir el nuestro. Una cantera enorme de circunstancias para ofrecer al Señor para el perdón de nuestros pecados y para unirnos a los sufrimientos de Cristo y colaborar a la Redención del mundo”, agregó.

También aseguró que “María nos ayuda a vivir más intensamente la lectura orante de la Palabra de Dios y la intensificación del espíritu de oración”. Por eso alentó en este tiempo a purificar nuestra vida de oración.

“Queridos hermanos, fiados en el Señor, lancémonos a vivir este itinerario cuaresmal acompañados por María, rumbo a la Pascua para que Cristo resucitado nos haga participes de su Paz y la llevemos a todas partes”, concluyó.+

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