Mons. Mestre: "Hay que romper la espiral de violencia siendo artesanos de la paz"

El obispo de Mar del Plata celebró una misa en Villa Gesell al cumplirse el tercer aniversario del asesinato de Fernando Báez Sosa. "Ojalá podamos decir 'la justicia y la paz se abrazarán'", pidió.

El obispo de Mar del Plata, monseñor Gabriel Antonio Mestre, celebró el miércoles 18 de enero una misa en el lugar de Villa Gesell, donde hace tres años fue ultimado a golpes el joven Fernando Báez Sosa. La Eucaristía fue concelebrada por el párroco de la localidad balnearia, presbítero Pablo Bosisio.

En la homilía, monseñor Mestre sugirió tres pensamientos a los presentes:

En primer término, el prelado marplatense oró por el eterno descanso de Fernando y pidió que el Señor “lo tenga en su gloria y dé fortaleza y consuelo a todos sus familiares y amigos, especialmente a sus papás Graciela y Silvino”.

Seguidamente, a la luz de la primera lectura, el obispo abogó por el legítimo pedido de justicia por un crimen tan dramático. “El texto de Deuteronomio habla dos veces de justicia, haciendo referencia con claridad a una justicia por caminos justos. La justicia es necesaria para sanar, al menos en parte, el daño provocado y honrar la memoria de quien ha sido brutalmente asesinado: ‘buscar la justicia, sólo la justicia’”.

Como tercer aspecto, el obispo de Mar del Plata invitó a que esto que nunca debería haber ocurrido, y que es muy doloroso, sea una buena lección para todos. “Somos desafiados a romper con la espiral de violencia que se vive en muchos niveles de nuestra sociedad. ¡Sí a la paz, no a la violencia!”, agregó.

En este sentido, además, señaló que “es fundamental tener presente la séptima bienaventuranza que nos transmite el Evangelio de hoy: ‘Felices los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios’”.

Por otra parte, el obispo puso como ejemplo a los padres de Fernando, Graciela y Silvino, “que varias veces pidieron justicia sin venganza”. “A la luz de algo tan horroroso como lo que aquí aconteció, somos invitados a superar la tentación de devolver mal por mal, y realmente ser artesanos e instrumentos de la paz como tantas veces nos invita el querido papa Francisco”.

Monseñor Mestre invitó a estar en comunión con los padres del joven fallecido, con quienes mantiene contacto telefónico y quienes ayer por la tarde se encontraban orando en la ciudad de Dolores, donde se desarrolla el juicio por el asesinato de su hijo.

Finalmente, el obispo destacó el mensaje del libro del Salmo compartido durante la celebración y el que señalaba que ‘La justicia y la paz se abrazarán’.

Finalmente, pidió que en medio del dolor por el brutal asesinato de Fernando y buscando erradicar todo tipo de violencia, “podamos decir cada día en nuestras familias y comunidades: ´La justicia y la paz se abrazarán’”.+