Mons. Corral: "Una ocasión para llevar alivio, consuelo y esperanza"

  • 12 de septiembre, 2022
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
El obispo de Añatuya y presidente de la Comisión Episcopal de Ayuda a las Regiones más Necesitadas presidió este domingo la misa de los argentinos en Roma, donde habló de la Colecta Más por Menos.

En el fin de semana en que se desarrolló la Colecta Más por Menos en la Argentina, el presidente de la Comisión Episcopal de Ayuda a las Regiones más Necesitadas, monseñor José Luis Corral SVD, presidió en Roma la misa de los argentinos.

La Eucaristía, celebrada en el templo de Santa María Adoloratta -sede de la Iglesia Argentina en Roma- estuvo concelebrada por el arzobispo de Córdoba, monseñor Ángel Sixto Rossi SJ; el obispo auxiliar de Corrientes, monseñor José Adolfo Larregain OFM, el rector del Collegio e Iglesia Argentina en Roma, padre Fabián Alesso, y varios sacerdotes. La recaudación estuvo destinada a colaborar con la colecta que año a año se ocupa de contribuir con los más desprotegidos.

En su homilía, el obispo de Añatuya destacó que el Evangelio marca "la cercanía, la compasión y la ternura" de Dios, retratado en el Padre "que en su corazón se inquieta por lo que falta, por el hijo perdido, ausente, que está lejos, y su alegría no es completa hasta que todos estén en casa como hermanos, compartiendo la mesa y la fiesta de la vida".

En referencia a la 53ª edición de la Colecta Nacional Más por Menos, el obispo afirmó: "Hoy se nos invita a juntar las manos para orar y a abrirlas para servir, dar y compartir", y al mismo tiempo, haciéndose eco de la invitación de los obispos argentinos, llamó a "orar por la Patria en esta hora de desencuentros, enfrentamientos, escepticismo y carencias".

Esta campaña solidaria, detalló en referencia a la colecta, "responde a la inequidad e intenta paliar las dificultades y necesidades que vive gran parte de la población, sobre todo la más vulnerable y alcanzada por la pobreza".

"En la actual crisis económica y social de nuestra Patria, el cotidiano está saturado de angustia y dolor para todos y sobre todo impacta más fuertemente para tantos hermanos nuestros, pobres estructurales y nuevos pobres. Estamos viviendo momentos muy difíciles, donde la pobreza material, cultural, espiritual, cada vez se extiende y enquista más en nuestra gente, y donde los pobres son muchas veces estigmatizados, manipulados o ignorados", advirtió.

"Esta colecta se realiza en un contexto social de mucho descontento y de mucha pérdida de confianza en las instituciones y en las autoridades, de mucha crispación y escepticismo que corroe las relaciones y la convivencia en armonía, realidad en la que todos tenemos algún tipo de responsabilidad y donde no siempre podemos desligarnos o culpabilizar unidireccionalmente contribuyendo a profundizar la fragmentación. Somos testigos de horas tensas, un clima raro nos envuelve y la incertidumbre nos cubre", describió.

En ese marco, alertó que "la mitad de los que vivimos en nuestro bendito país no tiene lo necesario para vivir de modo digno", y consideró que "el reto es sostener la esperanza del que no llega a fin de mes, a cubrir necesidades, a mantener a los suyos" y quienes ven que "sus esfuerzos no alcanzan o ya no dan más".

"Esta es una ocasión para que permitamos que aflore en cada uno lo mejor de nuestra generosidad y solidaridad. De este modo podremos llevarles algo de alivio, consuelo y esperanza", alentó.

"Se trata de que la dolorosa realidad nos conmueva las entrañas, se nos meta dentro, la asumamos y dejemos que encuentre eco en cada uno. Que el dolor nos duela, pero no para dejarlo ahí e igual, sino para aliviarlo y así alentar a que se pueda reaccionar, hacer algo, cambiar", exhortó, despertando no sólo compasión sino acciones concretas de servicio.

"Que el generoso compartir de hoy sea signo de fraternidad efectiva, y encienda una luz de esperanza hacia una Patria de hermanos. Que la generosidad de todos se transforme en acción de gracias a Dios que nos bendice con la fraternidad. Es un modo de nutrir y cultivar la esperanza y una inmensa oportunidad para unirnos y reconstruir una sociedad cimentada sobre la trama de la fraternidad, de la justicia, de la honestidad y del trabajo", afirmó. 

"Jesús nos comparte su deseo de que todos tengan vida y vida en abundancia; el deseo de generar una mirada y una vida comunitaria distinta, es un gran llamado a una conversión global", aseguró.

"El éxito de la colecta es su transparencia y da cuenta del milagro que puede lograr una pequeña ayuda y colaboración, confiar en que lo poco puesto en la campaña, significa mucho y permite realizar maravillas, cuyas consecuencias se hace muy difícil cuantificar", reconoció: "Da de comer al que tiene hambre, da vestido al desnudo, da de beber al sediento, da un techo al desabrigado, visita con un gesto al desamparado, da atención y calor de corazón al solo, procura un presente y un futuro mejor para todos. Ese es el país que deseamos y soñamos", sostuvo.

"Que como el Padre misericordioso seamos más misericordiosos y que no bajemos los brazos para buscarnos, encontrarnos, servirnos como hermanos haciendo juntos el camino hacia una Patria nueva, la civilización del amor, la cultura del encuentro y de la amistad social", rezó monseñor Corral, pidiendo a la Virgen de Luján que "nos acompañe hoy que oramos por la patria y abrimos nuestras manos a los más necesitados".+