Peregrinación Rosario-San Lorenzo y un pedido por las vocaciones

  • 13 de junio, 2022
  • San Lorenzo (Santa Fe) (AICA)
El arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Eliseo Martín, presidió la misa en el Campo de la Gloria, donde animó a los peregrinos a rezar por las vocaciones a la familia, religiosas y sacerdotales.

Una multitud de personas, en su mayoría jóvenes, participó de la 45ª Peregrinación Rosario-San Lorenzo que se llevó a cabo el domingo 13 de junio con la presencia del arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Eliseo Martín, quien presidió la misa en el Campo de la Gloria.

Los peregrinos salieron a las 7 desde la catedral Nuestra Señora del Rosario, para recorrer cerca de 30 kilómetros, pasando por las ciudades de Granadero Baigorria, Capitán Bermúdez, Fray Luis Beltrán hasta llegar a San Lorenzo, para participar de la misa prevista para las 15.

La manifestación de fe popular fue organizada por la Pastoral de Juventud de la arquidiócesis de Rosario, con el lema "Madre de la esperanza: guíanos".

En la homilía, monseñor Martín agradeció a los jóvenes de edad y espíritu que peregrinaron, expresando: “Gracias por este testimonio de fe y esperanza”. 

“Dios nos ha hecho para ser felices, pero la felicidad está en Él, en este Dios que se ha manifestado en Cristo Jesús, como Padre, Hijo y Espíritu Santo. En este Dios que se nos ha manifestado en Jesús como un Dios lleno de misericordia y un Dios que es amor”, recordó, y subrayó: “Hacia esa felicidad plena caminamos; es la vocación fundamental que tenemos todos”.

“Dios nos ha creado para ser santos e irreprochables en su presencia por el Amor, para santos, para ser felices, para Él”, sostuvo.

El arzobispo rosario afirmó que “Él espera cada día una respuesta a este llamado, a esta gran vocación, y nos ha dado caminos diversos para seguir este idea de santidad, de felicidad. El más numerosos es el camino del matrimonio, recemos por la vocación al matrimonio y a unirse para tener hijos”.

“Por eso hoy peregrinamos y rezamos por las vocaciones al matrimonio, para que haya jóvenes que tomen el riesgo y la valentía de asumir compromisos para siempre, hasta la muerte. El amor es eterno o no es verdadero, no es para un ratito, para un contrato que mañana se puede romper como se rompe un contrato de alquiler”, sostuvo.

“Necesitamos gente que comprometa su vida en el amor. Es lo que puede generar también un país mejor, una familia unida que pueda hacer crecer a sus hijos en paz y en equilibrio psicológico, afectivo y espiritual”, agregó.

Monseñor Martín indicó que “el Señor también ha querido elegir personas que sean como un signo, como una señal en el camino de la gloria eterna que son los que se consagran en la virginidad por el Reino de los Cielos, tanto varones como mujeres”, y reconoció: No se escucha mucho esta palabra (virginidad), no está muy cotizada en el ambiente”.

Luego habló sobre la vocación sacerdotal: "El Señor sigue tomando a los jóvenes y no tan jóvenes para que sean servidores de su pueblo, es decir los sacerdote, los obispos y el Papa, que no somos más que servidores de ustedes en orden a las cosas de Dios, para predicar la Palabra, celebrar la Eucaristía y los demás sacramentos y guiár al santo Pueblo de Dios”.

“Tenemos que seguir pidiendo por las vocaciones, por matrimonios santos que con su testimonio y palabra anuncien a Jesús; religiosas, religiosos, monjas, monjes, que con su vida anuncien a Jesús a tantos hermanos nuestros que no lo conocen; sacerdotes también que puede con su vida y su servicio al pueblo de Dios anunciar que Jesús es el Señor y que no hay otro para la salvación”, concluyó.+