La diócesis de Goya cerró el año jubilar por los 60 años de su creación

  • 30 de octubre, 2021
  • Goya (Corrientes) (AICA)
La misa fue presidida por monseñor Adolfo Canecín y hubo momentos emotivos con las presencias de los obispos eméritos Ricardo Faifer y Luis Stöckler. También se recordó al primer obispo Alberto Devoto

El obispo de Goya, monseñor Adolfo Canecín, cerró el 29 de octubre el año jubilar por los 60 años de la creación de la diócesis presidiendo una misa en el altar levantado frente a la catedral Nuestra Señora del Rosario, donde también realizó la apertura oficial de la fase local del Sínodo de la Sinodalidad convocado por el papa Francisco.

La Eucaristía fue concelebrada por el arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik OFMCap; el obispo de Santo Tomé, monseñor Gustavo AlejandroMotini; el obispo emérito de Goya, monseñor Ricardo Oscar Faifer y el obispo emérito de Quilmes y antiguo diocesano local, monseñor Luis Teodorico Stöckler, además del clero diocesano, con la participación de numerosos fieles de las comunidades de los departamentos del sur correntino.

La fiesta jubilar comenzó a la mañana con la llegada, procedentes de la localidad de Esquina, de la Cruz de las Misiones y la imagen de la Virgen de Itatí, patrona de esta diócesis, que durante la novena preparatoria fueron acompañadas por monseñor Canecín en las visitas a cada departamento de esta jurisdicción eclesiástica.

Por la tarde fue la celebración eucarística central, que se inició con la entrada de la imagen peregrina de Nuestra Señora de Itatí y la Cruz de las Misiones, acompañada por los obispo, y un centenar de sacerdotes, diáconos y seminaristas.

Entre otros sacerdotes que participaron de la celebración, estuvieron el padre Carlos Bartolomé, redentorista y colaborador durante muchos años del obispo Alberto Devoto, y los presbíteros Tomas von Schulz, Raimundo Romero, Víctor Hugo Arroyo y Federico Jara, que trabajaron intensamente en la vida pastoral diocesana desde sus inicios.

Uno de los momentos emotivos de la celebración fue la entrada de monseñor Stöckler, de 85 años y segundo obispo de la diócesis, quien entregó al diocesano actual el anillo que perteneció a monseñor Devoto, que lo había usado durante muchos años y “hoy regresó nuevamente a la diócesis”. También monseñor Faifer entregó el libro de su autoria “Memoria agradecida”.

En la homilía, monseñor Canecín recordó el compromiso que todos los bautizados deben asumir desde el lema del Año Jubilar: "Reflexionar, iniciar, consolidar y potenciar el ‘Ser’ una Iglesia bautismal-Pueblo de Dios, en salida misionera, con estilo sinodal".

"Estamos celebrando este jubileo diocesano con el lema ‘Vayan juntos y testimonien mi Vida’, asumiendo el lema del cincuentenario y los anteriores, adaptando e incorporando expresiones para responder a la realidad actual", indicó para resaltar que "en el novenario diocesano, iniciado en 1967 y mantenido ininterrumpidamente hasta nuestros días, exquisita y lograda herencia de comunión y participación, asumimos del rico Magisterio del Concilio Vaticano II la Constitución Dogmática sobre la Iglesia Lumen Gentium y su actualización y profundización en el magisterio del Papa Francisco".

"Hermanos todos: la Palabra del Señor recién proclamada nos habla de Jubileo, Año de Gracia, y nos invita a una profunda alegría y acción de gracias, además nos ofrece como único programa evangelizador el mismo de Jesús relatado en el Evangelio".

El prelado goyano afirmó que "en esta celebración jubilar, nos dejamos guiar por las palabras del paí guazú Julián Zini, poeta y cantor: ‘Qué linda la gente que tiene memoria, seguro que tiene esperanza también; qué lindo este pueblo que mira su historia, se junta y celebra cantando su fe’" y detalló: "Hacemos una profunda memoria agradecida, recordando rostros, nombres, anécdotas, etapas y procesos pastorales, vividos por todo el Pueblo de Dios y acompañado con sabiduría y prudencia por sus pastores: padre obispo Alberto Devoto (1961-1984), con su lema: ‘Yo siempre estaré contigo’; padre obispo Luis Stöckler (1985-2002), con su lema: ‘Sujeto a ellos’ y padre obispo Ricardo Faifer (2002-2015), con su lema: Para servir".

"Al incorporarme a la diócesis, 6 años atrás, y al unir los lemas de mis predecesores, formé con ellos una frase que me empeño en vivir: 'Yo siempre estaré contigo, sujeto a ellos, para servir en la unidad-comunión-sinodalidad", reveló.

Un acto cultural conducido por el joven sacerdote Ariel Giménez, con la participación de grupos chamameceros, marcó el final de la gran fiesta diocesana.+