Mons. Uriona: "Aprender a tocar la carne herida de nuestros hermanos"

  • 9 de septiembre, 2021
  • Río Cuarto (Córdoba)
En su homilía de este domingo, monseñor Adolfo Uriona reflexionó sobre el rol salvador de Jesús y exhortó a "tocar aquello que está herido" para llevar esa salvación.

El obispo de Villa de la Concepción del Río Cuarto, Monseñor Adolfo Uriona FDP celebró misa este domingo 5 de septiembre en la capilla Virgen Peregrina de Luján de la ciudad. En su homilía, rescató que Jesús estaba predicando en las regiones paganas, y el milagro que realiza “tiene un significado que va mucho más allá”. 

En cuanto a esto, observó: “Es Jesús quien viene para salvar a una humanidad que está sorda y muda. Muchas veces, el pueblo de Israel no escuchaba el mensaje de Dios y no respondía a lo que Él pedía, a lo que Dios quería de ellos. Y Jesús vino a salvar a esa humanidad, y vino a traer esta capacidad de escucha. El modo en que lo hace Jesús es muy distinto a otros milagros”.

En ese sentido, prosiguió: “Cuando Jesús vino a salvarnos no lo hizo desde un decreto desde el cielo, sino que lo hizo encarnándose, mezclándose con la impureza. Se hizo hombre en todo, menos en el pecado”.

“Jesús nos salva desde la solidaridad, desde el estar con nosotros, desde tocar nuestra carne. Hay que aprender nosotros también a tocar la carne herida de nuestros hermanos. Hay que aprender a tocar a nuestros hermanos con una serie de gestos”, profundizó.

“Jesús sana con una palabra, ‘ábrete’, pero también con gestos. Hoy nuestra humanidad necesita de estas palabras, de estos gestos, y por eso nosotros tenemos que ser esos testigos que nos acercamos a las personas con nuestra presencia, cercanía y también tocando aquello que está herido para que puedan sentir la salvación de Dios”, exhortó.

Por último, pidió “la gracia de sentir a este Jesús misericordioso que se mezcla con nuestra humanidad”.+