Mons. Barba animó a los comunicadores a ser servidores

  • 17 de agosto, 2020
  • San Luis (AICA)
El obispo de San Luis presidió la misa de San Maximiliano Kolbe, en la que destacó la importancia que tienen y pidió a las comunidades diocesanas ayudar a organizar el "ministerio de la Comunicación".

El obispo de San Luis y presidente de la Comisión Episcopal de Comunicación Social, monseñor Gabriel Barba, presidió la misa por la memoria litúrgica de San Maximiliano Kolbe, patrono de los comunicadores católicos.

La Eucaristía fue concelebrada por el presbítero Ignacio Daminato y algunos colaboradores, en la parroquia San Roque.

“Las lecturas de hoy nos invitan a ser sabios a los ojos de Dios, uno de los dones del Espíritu Santo, el don de la sabiduría”, recordó, y agregó: “La sabiduría del Evangelio, quizás parece imprudencia a los ojos de los hombres, porque la sabiduría que viene del Espíritu Santo tiene que ver con el abandono, con la confianza, con una mirada y unos ojos que tienen certeza de lo que no se ve”.

En relación con el martirio, el prelado afirmó: “No es algo que se provoca, sino que es algo que se recibe, es un don. Los mártires tienen ese don que ven lo que supera la naturaleza y que solo es posible por la fuerza y por la gracia de Dios”.

“San Maximiliano Kolbe dicen que era un enamorado de las comunicaciones. Fue alguien que no amó tanto su vida, sino que fue capaz de renunciar y de entregarla para salvar la vida de otro condenado en aquel campo de concentración”, destacó.

“Nosotros en el bautismo somos llamados a morir al pecado, morir al egoísmo, morir a los propios proyectos”, señaló.

Tras una referencia al evangelio del día, en el que, en la última cena, Jesús invita a los apóstoles, sostuvo: “San Maximiliano María Kolbe porque murió, vivió, porque perdió su vida, la encontró. Esa entrega que él hizo, Dios la convirtió en martirio fecundo”.

Monseñor Barba hizo también referencia a este tiempo de pandemia, que le puso un freno a la humanidad, y expresó: “Los comunicadores católicos nos han mostrado con sus hechos, con sus acciones, con sus capacidades, con sus estrategias comunicacionales, el gran servicio que prestan a la Iglesia y que necesitamos que hoy sigan prestando”.

Invitó a los comunicadores católicos para que en las comunidades “ayuden a organizar el ministerio de la Comunicación” y añadió: “La misión se profundiza y llegamos más lejos si nuestros comunicadores trabajan bien, son eficaces, son generosos y viven una verdadera espiritualidad de la comunicación”.

El obispo sanluiseño pidió la intercesión de Kolbe para que “ayude a tomar conciencia de la importancia de quien tenga este don, para prestar este servicio” y animó a las comunidades a darle “la relevancia que merece para que la evangelización pueda llegar a otros”.

“Hoy tenemos muchas ventanas por donde entrar, que son las redes y las distintas formas de comunicación”, recordó, y afirmó:  “Pidamos aprovecharlas de tal manera, para que la Buena Noticia pueda llegar al corazón de los que más lo necesitan, muy especialmente de aquellos que se han alejado por distintos motivos”.

“Ojalá podamos llevar mediáticamente nuestra presencia, para que puedan abrazar la fe, y vivir la alegría de sentir la misericordia de Dios a su lado”, concluyó.

Más adelante, algunos profesionales de los medios de comunicación, rezaron una oración en nombre de todos los comunicadores católicos.

Al final, monseñor Barba impartió una bendición especial: “Que Dios los bendiga y que los haga fieles servidores de la comunicación hacia los hermanos”.+