Un nuevo reclamo por la vida y la familia
- 22 de octubre, 2015
- Buenos Aires (AICA)
En el Congreso Nacional y en las legislaturas provinciales, agrupaciones civiles y movimientos católicos se manifestaron para reclamar que el Estado proteja el derecho a la vida y promueva políticas públicas para promover la familia. Presencia de obispos en Corrientes y en Santiago del Estero.
En Corrientes, el arzobispo Andrés Stanovnik acompañó a los manifestantes al encuentro del presidente de la Cámara de Diputados, Pedro Cassani, quien recibió un petitorio firmado por las organizaciones convocantes.
En Santiago del Estero, la Marcha Nacional por la Vida y la Familia congregó a una multitud y contó con la presencia de los líderes religiosos de la provincia. El obispo diocesano, monseñor Vicente Bokalic Iglic CM, participó de la manifestación, como también lo hicieron el pastor Antonio Zaiek, de la Iglesia Evangélica; y el padre Gregorio Makantasis, de la Iglesia Ortodoxa, entre otros.
Entre los puntos más sobresalientes, los manifestantes pidieron el respeto y la protección de la vida humana en todas las etapas de su desarrollo, desde la concepción hasta la muerte natural; y la promoción de la estructura natural de la familia fundada en el matrimonio de un varón y una mujer, abierto a la transmisión de la vida.
Al cierre de la marcha, los participantes pidieron votar a conciencia este domingo "por candidatos que defiendan la vida como un derecho no negociable". Luego, se realizó un acto ecuménico en el que los fieles cristianos rezaron el padrenuestro. Después hubo un pequeño recital a cargo de una banda de música católica.
El mensaje del obispo
Monseñor Vicente Bokalic, obispo de Santiago del Estero, acompañó a los grupos que marcharon por las calles de la ciudad y les expresó su apoyo por la lucha que llevan adelante para defender la vida.
"Queremos que nuestras familias aporten a la construcción de una sociedad más justa, más igualitaria, más inclusiva, con los valores humanos y los valores evangélicos. Una familia que nace del amor entre el hombre y una mujer", dijo el prelado.
El obispo pidió para que Jesús "bendiga nuestras familias" y que "nos haga testigos valientes y audaces del valor familiar, queremos un corazón solidario con aquellos hogares vulnerables". También pidió a los presentes estar cerca de "donde hay violencia, persecuciones, tristeza, angustia o desesperación".
"Queremos llegar a esos hogares donde hay sufrimiento y dolor, para llevarles la esperanza, para decirles que desde la experiencia queremos abrazarlos y acompañarlos para crecer como la familia humana, donde podamos vivir en paz, donde podamos hacer el bien, donde estemos cerca de los postergados, donde pongamos todo de nosotros para construir una sociedad, una comunidad verdaderamente pacífica", dijo el prelado.+
