Recordarán al Hno. Figueroa, a 70 años de su muerte
- 13 de noviembre, 2012
- Santa Fe
El lunes 19 de noviembre la arquidiócesis de Santa Fe de la Vera Cruz recordará, con la celebración de una santa misa, al Hermano Figueroa, al cumplirse los 70 años de su muerte. La celebración eucarística, en la que se pedirá por la pronta definición de la Causa de Beatificación del Siervo de Dios Hermano José Marcos Figueroa SJ, será presidida por el arzobispo de Santa Fe de la Vera Cruz, monseñor José María Arancedo, y tendrá lugar en el Santuario Nuestra Señora de los Milagros, de los Padres Jesuitas (San Martín y avenida Brigadier General Estanislao López) donde se encuentra su tumba.
La celebración eucarística, en la que se pedirá por la pronta definición de la Causa de Beatificación del Siervo de Dios Hermano José Marcos Figueroa, será presidida por el arzobispo de Santa Fe de la Vera Cruz, monseñor José María Arancedo, y tendrá lugar en el Santuario Nuestra Señora de los Milagros, de los Padres Jesuitas (San Martín y avenida Brigadier General Estanislao López) donde se encuentra su tumba.
La vida del Hermano Figueroa
El hermano José Marcos Figueroa nació en 1865 en Tinajo de Lanzarote, Islas Canarias, en una familia de labriegos. A los 8 años se trasladó al Uruguay con su familia estableciéndose en las cercanías de Santa Lucía.
Siendo muy joven ingresó en la Compañía de Jesús. En 1888 terminó los dos años de noviciado, consagrándose al Señor mediante sus votos religiosos. Inmediatamente debió partir para Santa Fe junto con el padre Bustamante. En 1892 quedó encargado de la portería del Colegio de la Inmaculada Concepción. A partir de allí, y durante 52 años, se desempeñó con fidelidad e inmensa responsabilidad en su trabajo de portero; destacándose por su conducta intachable y su cumplimiento absoluto al deber.
Contaba con 77 años de edad y 56 de vida religiosa cuando el 19 de noviembre de 1942 terminó sus días de igual manera como vivió, en silencio y humildad.
El Hermano Figueroa es recordado en el colegio de la Inmaculada Concepción, no sólo por ser el encargado de la portería durante tantos años, sino porque este trabajo lo desempeñó con total fidelidad, infinita paciencia y gran humildad. Fue un hombre insigne en sus virtudes. A todos atendía con mansedumbre y paz inalterables, cumpliendo siempre con fidelidad hasta los detalles más mínimos de su trabajo y misión.
Son muchos los alumnos y docentes del colegio que en su época vieron en él un testimonio vivo de amor y entrega a Dios y a los demás. También son muchos los santafesinos que aprendieron cómo este humilde portero les hablaba de Dios con su entrega gratuita y silenciosa, sin ruidos, pero con mucho amor.
Actualmente sus restos descansan en el Santuerio de Nuestra Señora de los Milagros, lugar donde acuden muchos devotos que piden la intercesión de este querido portero.
Son innumerables las gracias y favores que Dios concedió por el Hermano después de su muerte, que hicieron posible se introdujera la Causa de Canonización.
Informes: Teléfono: (0342) 459-5791 / 458-1780 / Fax: (0342) 459-4491; Correo electrónico: curia@arquisantafe.org.ar +
