Mons. Ojea llamó a realizar una "oración auténtica" por los profesionales de la comunicación

El obispo de San Isidro, monseñor Oscar Vicente Ojea, instó a realizar una "oración auténtica" por los profesionales de la comunicación durante el próximo domingo, cuando la Iglesia celebre la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales. El prelado valoró la "nobleza" de la vocación periodística e insistió en que la verdad "no puede ser apropiada", sino que es necesario servirla con transparencia y sin ocultamientos.

La Iglesia celebrará este domingo la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, al igual que lo viene haciendo desde hace 47 años, por iniciativa del siervo de Dios Pablo VI. Por este motivo, el obispo de San Isidro, monseñor Oscar Vicente Ojea, recordó el mensaje que el papa Benedicto XVI difundió en enero con ocasión de esta fecha, bajo el título "Redes sociales: portales de verdad y de fe, nuevos espacios para la evangelización".

"En este domingo, en el que Jesús comunica el cielo con la tierra, que lleva toda nuestra humanidad y la presenta a la Santísima Trinidad, la Iglesia reza por las comunicaciones sociales y envía a todos los comunicadores, periodistas, responsables de la información, de la búsqueda de la verdad y de mantener al pueblo informado un mensaje", recordó el obispo.

"A veces pensamos qué necesaria la comunicación en este momento, qué importante que es, cómo muchas veces nos falla la comunicación, cómo extrañamos estar al tanto, saber, estar informados... Muchas otras veces decimos que la comunicación sirve a ideas preconcebidas, está anquilosada porque hay intereses preconcebidos a los cuales se sirve", estimó el obispo. "Entonces hay cosas que hay que decir, hay otras que no hay que decir, cosas que convienen decir, cosas que no convienen decir", añadió.

Monseñor Ojea valoró la "nobleza" de la vocación periodística e instó a una "oración auténtica" por esta "función tan importante en la sociedad". Asimismo, insistió en que la verdad "no puede ser apropiada", sino que es necesario servirla: "Tenemos que ser transparentes, tenemos que tratar de decir todo, de no guardar cosas, de no servir a ningún interés más que al pueblo que pueda discernir y ayudar a discernir. ¡Qué beneficio para la libertad es tener una buena comunicación! ¡Qué escuela para el diálogo y para poder vivir auténticamente en democracia!".

Finalmente, el obispo recordó el trabajo muchas veces dificultoso en el que se ven envueltos los profesionales de la comunicación: ¡Cuánto trabajo el de nuestros periodistas, a veces trabajando en zonas dificilísimas! Pienso en los periodistas de las zonas de conflicto, los que arriesgan su vida, los que esperan larguísimo tiempo para poder tener información, los que se sacrifican trabajando en cualquier medio... A todos ellos, por la nobleza de su profesión y el servicio a la verdad les agradecemos todo el bien que le hacen a la comunidad, rezamos por ellos y pedimos al Señor comunicaciones cada día más transparentes, claras y auténticamente servidoras de la verdad".+