Mons. Mollaghan: "No podemos permanecer indiferentes a la reforma del Código Civil"
- 28 de agosto, 2012
- Rosario (Santa Fe) (AICA)
El arzobispo de Rosario, monseñor José Luis Mollaghan, presidió la misa dominical, que fue transmitida por canal 5 de Rosario, en la que manifestó que "la reforma legislativa en curso, afecta nuestra cultura y nuestra vida cotidiana; proyecta cambios que nos tocan de cerca" y agregó que "se deben tener en cuenta la riqueza de nuestras tradiciones jurídicas y constitucionales, como los principios y valores que hacen a nuestra vida e identidad". El pastor pidió que se reconozca "el comienzo de la vida humana desde la concepción y su necesaria protección jurídica" e instó a "valorar la familia".
El prelado advirtió que "en esta visión actual, pareciera que de tanto subrayar lo subjetivo, y las opciones individuales, se deja de lado la preocupación por el bien común, para dar paso a la realización inmediata de las aspiraciones de cada uno, planteadas como si todos fueran derechos; y muchas veces creando otros nuevos, muchas veces arbitrarios".
"Se ve la afirmación exasperada de derechos individuales y subjetivos sin preocupación por criterios éticos fundados; llegando a distorsionar una visión integral, armónica, donde se proteja, por ejemplo, a los que son más vulnerables", aseguró y añadió que "se acepta que se legisle dejando de mirar la realidad natural, aceptando lo que es naturalmente imposible, abandonado la herencia recibida, y la experiencia consolidada".
El pastor rosarino afirmó que la reforma del Código Civil "nos compromete" y añadió que "no podemos, permanecer indiferentes ni ser simples espectadores de decisiones que nos involucran y que requieren de una madura reflexión y de una amplia participación federal".
"La reforma legislativa en curso, afecta nuestra cultura y nuestra vida cotidiana; proyecta cambios que nos tocan de cerca", recordó monseñor Mollaghan y agregó que "se deben tener en cuenta la riqueza de nuestras tradiciones jurídicas y constitucionales, como los principios y valores que hacen a nuestra vida e identidad".
El arzobispo pidió que se reconozca "el comienzo de la vida humana desde la concepción y su necesaria protección jurídica" e instó a "valorar la familia fundada sobre el matrimonio, como relación estable del varón y la mujer y ámbito primero en la educación de los niños. La familia es una realidad con profundas raíces en el pueblo argentino y a lo largo de todo el país, es un bien que es garantía para la sociedad".
"El régimen de la paternidad, la maternidad y la filiación, así como otras instituciones proyectadas, generan incertidumbre en torno a la protección de los derechos de los niños. Una sociedad que no privilegie los derechos e intereses de los niños por sobre los de los adultos, se empobrece socialmente", resaltó.
El prelado recordó que "no todo lo que es técnicamente posible y deseado en el manejo de la vida es necesariamente ético y respeta su dignidad. Así, existen serias objeciones éticas y jurídicas en torno a la fecundación artificial que deberían conducir a una reflexión más atenta y no sólo permisiva".
Monseñor Mollaghan también advirtió por la dignidad de las mujeres y de los niños en los casos de maternidad subrogada o gestación por sustitución y resaltó que "esta figura desconoce el profundo vínculo psicológico que se establece entre la madre gestante y el niño al que da a luz".
Como conclusión, el pastor de Rosario dijo: "Pidamos a Nuestra Madre que podamos continuar profundizando estos temas, y que Dios ilumine a los responsables de estos cambios, que miran al bien de todos" +
Texto completo de la homilía