Mons. Mestre invitó a los jóvenes a dejarse "llenar" por el Espíritu Santo

El obispo de Mar del Plata, monseñor Gabriel Mestre, dedicó un mensaje a los jóvenes de la diócesis con motivo de la fiesta de Pentecostés. Durante celebración eucarística, el obispo marplatense realizó el envío de los jóvenes que participarán del II Encuentro Nacional de Juventud que tendrá lugar en la ciudad de Rosario el próximo fin de semana.

El pasado sábado 19, se celebró en la catedral marplatense una vigilia de oración, con motivo de la fiesta de Pentecostés, con los jóvenes como protagonistas. A las 23, monseñor Gabriel Mestre, obispo de Mar del Plata, celebró la Eucaristía y envío a los jóvenes de la diócesis que viajarán a Rosario, el próximo fin de semana, al II Encuentro Nacional de Juventud.

"Queridos jóvenes, estamos juntos en esta noche en la fiesta de Pentecostés para recibir como regalo la presencia del Espíritu en la vida de todos y cada uno de nosotros. No es un recuerdo del pasado, sino que hoy es Pentecostés, aquí en la catedral, es el Pentecostés de los jóvenes", inició diciendo el obispo en la homilía.

Monseñor Mestre propuso a los jóvenes "a la luz de las distintas lecturas de la palabra de Dios", sus habituales tres puntos para meditar y reflexionar, sintetizados en tres palabras: "reunidos, llenos y hablar".

"Cuidemos y defendamos siempre el estar reunidos, vivir en familia, vivir en comunidad", comenzó señalando en el primer punto. Luego se detuvo en ?llenos?: "todos quedaron llenos del Espíritu Santo", y continuó: "El Espíritu Santo cuyas imágenes aparecen como fuego, como fuerte viento, viene a movernos las estanterías de nuestra vida para que se caiga todo lo que se tiene que caer y ordenar en nuestra vida todo lo que haya que acomodar", enseñó a los jóvenes.

Finalmente en la tercera y última palabra ?hablar?. "Todos comenzaron a hablar distintas lenguas", dijo recordando el texto bíblico y les explicó: "El texto implica la capacidad de cantar, gritar las maravillas de Dios, según la lengua particular de cada hermano, familia, hermano según su propia necesidad o situación de este momento".

Por último el obispo de Mar del Plata expresó: "Qué lindo queridos jóvenes si reunidos, se dejan llenar por el Espíritu Santo y se animan a hablar las lenguas de nuestra cultura, nuestro tiempo, nuestra realidad en cada rincón de la ciudad." Al finalizar la misa, monseñor Mestre bendijo a todos los que viajarán a Rosario al II Encuentro Nacional de Jóvenes.+