Viernes 29 de marzo de 2024

Mons. Lozano advirtió que las organizaciones criminales crecen al amparo de la corrupción

  • 14 de agosto, 2015
  • San Isidro (Buenos Aires) (AICA)
El obispo de Gualeguaychú y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, advirtió que las organizaciones criminales dedicadas a la trata de personas o al narcotráfico crecen al amparo de la corrupción, apuntó a quienes tienen "dinero manchado con sangre" y aseguró que estas "mafias" también van en contra de la democracia. El prelado hizo estas afirmaciones al disertar sobre "Corrupción, crimen organizado, trata de personas y narcotráfico", en una cátedra abierta organizada por la Universidad de San Isidro (USI) en el marco de la Diplomatura sobre Delitos del Crimen Organizado.
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El obispo de Gualeguaychú y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, advirtió que las organizaciones criminales dedicadas a la trata de personas o al narcotráfico crecen al amparo de la corrupción, apuntó a quienes tienen "dinero manchado con sangre" y aseguró que estas "mafias" también van en contra de la democracia.

El prelado hizo estas afirmaciones al disertar sobre "Corrupción, crimen organizado, trata de personas y narcotráfico", en una cátedra abierta organizada por la Universidad de San Isidro (USI) en el marco de la Diplomatura sobre Delitos del Crimen Organizado.

Monseñor Lozano alertó que "estructuras de pecado que se consolidan por medio de organizaciones criminales que tienen como finalidad la explotación de otros hermanos".

"De este modo operan redes de narcotráfico, de trata de personas para la explotación sexual o laboral, de tráfico de armas, contrabando, juego, lavado de dinero. También se organizan para el robo de bebés y la realización de trámites fraudulentos de adopción", puntualizó y aseguró: "Se cae en la idolatría del dinero y el poder por encima de los derechos humanos".

El obispo insistió en advertir que "estas mafias van también en contra de la democracia, porque al operar fuera de las leyes del Estado (no hay igualdad ante la ley) ceden soberanía del pueblo al crimen organizado".

"De esta manera nos encontramos con que controlan territorios, disponen quién vende droga y quién consume, deciden qué se controla y qué pasa la frontera impunemente; en qué lugares se roban vehículos, dónde se los desarma y cómo se venden los repuestos", agregó.

Tras recordar que "no existe el derecho a oprimir ni usar a nadie", lamentó que "vivamos en una sociedad con valores distorsionados".

"Por un lado se avanza paulatinamente en el reconocimiento de derechos a los animales, y se prohíbe su uso en los circos para diversión de las personas. Pero a su vez se pretende justificar que alguna persona (mujer o varón) sea considerada objeto de placer para diversión de sus semejantes", observó.

Monseñor Lozano afirmó, parafranseando a Jorge Bergoglio, que "en algunos municipios se prohíbe la tracción a sangre de caballo para los carros de cartoneros, pero se mira para otro lado cuando son niños quienes realizan la misma tarea".

"No se puede tener una mirada ingenua sobre este drama; hay mafias que se enriquecen y oprimen. La corrupción y complicidad abarca diversas estructuras políticas y sociales: Fuerzas de seguridad, Poder Judicial, Poderes Públicos. La motivación puede ser el dinero o el miedo por amenazas".

El obispo reconoció que le ha tocado "escuchar testimonios desgarradores que indignan y enojan" y detalló: "Se ha dado incluso que quienes toman declaración a las víctimas tras un operativo de seguridad han sido visitantes asiduos de los locales de oferta sexual. O mujeres que lograron escapar y acudieron a pedir ayuda a un móvil policial, que las subió y las llevó nuevamente al prostíbulo del que habían logrado huir".

Monseñor Lozano destacó que el Papa abre su corazón acerca de este flagelo cuando admite que siempre le angustió la situación de los que son objeto de las diversas formas de trata de personas", porque "quisiera que se escuchara el grito de Dios preguntándonos a todos: ´¿Dónde está tu hermano?´".

"¿Dónde está tu hermano esclavo? ¿Dónde está ese que estás matando cada día en el taller clandestino, en la red de prostitución, en los niños que utilizas para mendicidad, en aquel que tiene que trabajar a escondidas porque no ha sido formalizado? No nos hagamos los distraídos. Hay mucho de complicidad. íLa pregunta es para todos! En nuestras ciudades está instalado este crimen mafioso y aberrante, y muchos tienen las manos preñadas de sangre debido a la complicidad cómoda y muda", concluyó citando la exhortación apostólica Evangelii gaudium.

Informes: www.usi.edu.ar.+