Viernes 29 de marzo de 2024

Mons. Cardelli: "Cuando uno se acerca a ciertas realidades, no puede pasar de largo"

  • 7 de mayo, 2014
  • San Nicolás (Buenos Aires)
El obispo de San Nicolás de los Arroyos, monseñor Héctor Sabatino Cardelli, animó un encuentro de voluntarios de la "Noche de la Caridad" con una reflexión sobre el sentido de este servicio solidario que desde la Iglesia se brinda a las personas en situación de calle o de extrema pobreza. Monseñor Cardelli destacó la promoción de los jóvenes que se hace desde este espacio y desde otros. Destacó la tarea del presbítero Damián Vidano, quien reúne en la parroquia de Nuestra Señora de Fátima a jóvenes de bajos recursos o excarcelados y les enseña oficios.
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El obispo de San Nicolás de los Arroyos, monseñor Héctor Sabatino Cardelli, animó un encuentro de voluntarios de la "Noche de la Caridad" con una reflexión sobre el sentido de este servicio solidario que desde la Iglesia se brinda a las personas en situación de calle o de extrema pobreza.

Monseñor Cardelli recordó que la "Noche de la Caridad" surgió en San Nicolás por un grupo de gente joven con inquietudes de querer hacer algo por el prójimo. "Una noche al mes, salimos a dar un plato de comida a la gente que está carenciada, en la calle, en zonas de la ciudad que son bastante necesitadas. Esto nos fue llevando a ampliar cada vez más nuestro espectro, porque una noche por mes es insignificante. Nos hizo replantear una serie de cosas, porque esto sería una especie de caridad, de ayuda momentánea, que siempre es bueno, pero no les soluciona el problema a las personas".

El prelado advirtió que, en sus salidas, los jóvenes se encontraron "con situaciones de precariedad básicas" que motivaron buscar soluciones más profundas a la situación de estas personas. "En este voluntariado se sumaron profesionales médicos que revisan el estado de los chicos de manera primaria, aconsejan a las mamás, les recomiendan que los lleven al centro", explicó el obispo.

Monseñor Cardelli relató al diario local El Norte que suele acompañar a los grupos en sus salidas, aunque de forma discreta. No obstante, los jóvenes voluntarios le comentaron que en la villa cercana al santuario de la Virgen del Rosario de San Nicolás lo reconocieron y, cada tanto, preguntan por él.

"Lo mío es estimular al grupo ?confió-. El Papa nos está insistiendo mucho en esto, y si bien la actividad que tenemos es amplia, no podemos descuidar la cercanía en cada caso particular. Esto me toca y por eso lo hago, porque creo que para mí seria una falta muy seria ignorar este tipo de situaciones que viven algunas personas en nuestra ciudad y de nuestra diócesis".

"De ningún modo es un clientelismo ?explicó el prelado-. La frase de Jesús que más nos mueve es «Estuve enfermo, y me viniste a ver, tuve hambre y me diste de comer, estaba sin techo y me proveíste». A veces estamos escasos para satisfacer las necesidades, pero en todo caso algunas las podemos cubrir y siempre es para mejor".

Monseñor Cardelli destacó la promoción de los jóvenes que se hace desde este espacio y desde otros. Destacó la tarea del presbítero Damián Vidano, quien reúne en la parroquia de Nuestra Señora de Fátima a jóvenes de bajos recursos o excarcelados y les enseña oficios.

"Este tipo de cosas me parece que el Papa Francisco las ha despertado y me encanta ver a estos muchachos jóvenes, estos sacerdotes que recogieron el guante y empiezan a hacerlo con vocación de servicio y propuesta evangélica. Están brotando cosas muy lindas y espero que podamos hacerlas extensivas a más centros comunitarios de la diócesis", deseó el obispo.+