Millones de mexicanos veneraron a la Virgen de Guadalupe
- 14 de diciembre, 2015
- México
Una multitud de mexicanos, estimada por las autoridades en cinco millones de personas, peregrinaron hoy a la basílica de la Virgen de Guadalupe para pedir, agradecer y venerar a la Patrona de México y América. La fiesta mariana tuvo un condimento extra: el papa Francisco confirmó su viaje a México en febrero y anunció: "El 13 de febrero estaré en el santuario de la Virgen de Guadalupe para venerarla".
La fiesta comenzó la noche del viernes con el canto de las tradicionales "Mañanitas" y danzas prehispánicas.
La fiesta mariana tuvo un condimento extra: el papa Francisco confirmó hoy en la basílica de San Pedro, donde presidió una misa por la Virgen de Guadalupe, que visitará México del 12 al 18 de febrero próximo.
"El 13 de febrero estaré en el santuario de la Virgen de Guadalupe para venerarla" durante el año del Jubileo, destacó hoy el pontífice.
Francisco dijo que realizará la visita al santuario "por todas las Américas", de la que la Virgen de Guadalupe es "madre de manera especial".
La fiesta de la patrona de América tuvo su punto cumbre en la Apertura de la Puerta Santa de la Basílica y la Eucaristía Solemne de las Rosas, presididas por el Arzobispo de México, cardenal Norberto Rivera Carrera. En esta Eucaristía, el purpurado leyó un mensaje especial enviado por el Papa Francisco.
La celebración de este año tuvo por lema "Santa María de Guadalupe, la ternura y la misericordia de Dios y su justicia en nuestras vidas".
El cardenal Rivera destacó en su homilía la unión de esta celebración con la presidida por el papa Francisco en el Vaticano, en la cual dedicó el Año Santo de la Misericordia a Nuestra Señora de Guadalupe. El arzobispo leyó unas palabras del Santo Padre con motivo de la fiesta de la Patrona de México y Emperatriz de América, a quien encomendó "los sufrimientos y las alegrías de todo el Continente Americano, que la aman como madre, la reconocen como Patrona, bajo el título entrañable de Nuestra Señora de Guadalupe".
"Que la dulzura de su mirada nos acompañe en este Año Santo, para que todos podamos redescubrir la alegría de la ternura de Dios", expresó el Pontífice, citado por el purpurado. "A Ella le pedimos en este Año Jubilar que sea una siembra de amor misericordioso en el corazón de las personas, de las familias, de las naciones. Que nos siga repitiendo: ?No tengan miedo. ¿Acaso no estoy Yo aquí que soy tu Madre?´ Madre de misericordia".
El purpurado explicó que la Santísima Virgen "es el modelo y la estrella para conducirnos a la fuente de la misericordia" y exhortó a los fieles a no oponerse al amor de Dios, debido a que la voluntad humana es necesaria para aceptar el don de la misericordia divina. El modelo de esta cooperación humana es la Madre de Dios: "Ella le dijo con gran valor: Sí, "hágase en mí según tu palabra", y esto en toda su vida fue una constante, hasta cuando Ella estaba al pie de la cruz, sufriendo al contemplar a su Hijo amado", describió, "aquel que tuvo en su inmaculado vientre, aquel que tuvo su espacio, aquel que tuvo sus cuidados, su calor, su alimento".
"Por medio de Santa María de Guadalupe, tenemos el camino seguro a la misericordia de Dios, sin miedos, sin temores, sin ansiedades, sin complejos, sin angustias", concluyó el arzobispo, quien parafraseó las palabras del relato del Nican Mopohua: "No tengas miedo, no tengas miedo, ¡No tengas miedo! ¿Acaso no estoy yo aquí, que tengo el honor y la dicha de ser tu madre? ¡No tengas miedo! Yo soy tu protección y resguardo ¡No tengas miedo! Yo soy la fuente de tu alegría ¡No tengas miedo! Te tengo colocado en el hueco de mi manto y te sigo abrazando en el cruce de mis brazos. ¡No tengas miedo hijo mío! ¡Te amo con todo mi corazón!"
