El seminario de La Plata cumplió 98 años

Fue fundado el 10 de enero de 1922 por decreto del entonces obispo de La Plata, monseñor Francisco Alberti

Hoy, 10 de enero, cumple 98 años el Seminario Mayor San José, de la arquidiócesis de La Plata, ubérrimo semillero de sacerdotes de la Iglesia en la Argentina, entre los cuales se cuentan 27 obispos, tres de ellos elevados a la púrpura cardenalicia. Fue fundado el 10 de enero de 1922 por decreto del entonces obispo de La Plata, monseñor Francisco Alberti.

“Largo es el camino recorrido desde aquel día –señaló el presbítero Hugo Segovia, uno de los sacerdotes surgidos del seminario platense: egresó en 1961-. Un camino jalonado por hombres y obras que ocupan un lugar importante en la historia eclesiástica argentina que allí enseñaron, se formaron y tuvieron su hogar”.

Según aporta el padre Segovia, “una figura señera elegida para dar forma al proyecto del seminario fue la de monseñor Santiago Luis Copello que, por aquellos años era auxiliar de la diócesis. Presidente de la comisión pro-seminario demostró en su creación las dotes que luego derrocharía como arzobispo de Buenos Aires (1932-1959). A su nombre está ligado el XXXII Congreso Eucarístico Internacional de 1934 y el primer cardenal de la América española en 1935”.

Los cursos comenzaron en 1923 y desde 1934, año tras año, fueron saliendo de la calle 24 entre 65 y 66, promociones de sacerdotes que se han dispersado por muchos caminos de la Argentina. En algunos momentos se formaban en esta casa seminaristas de Salta, Viedma, Corrientes y San Juan.

“La gran mayoría de los sacerdotes de la diócesis de Mar del Plata –señala el padre Segovia que está radicado en esta diócesis- fueron alumnos del seminario de La Plata.

Del Seminario San José de La Plata surgieron 27 obispos, tres de los cuales fueron cardenales:

Cardenales
Cardenal Raúl Francisco Primatesta, arzobispo de Córdoba;
Cardenal Antonio Quarracino, arzobispo de Buenos Aires;
Siervo de Dios, Cardenal Eduardo Francisco Pironio, presidente del Pontificio Consejo para los Laicos.

Arzobispos
Mons. Antonio José Plaza, arzobispo de La Plata;
Mons. Adolfo Servando Tortolo, arzobispo de Paraná;
Mons. Jorge Mayer, arzobispo de Bahía Blanca;
Mons. José María Arancedo, arzobispo de Santa Fe de la Vera Cruz;
Mons. Guillermo José Garlatti, arzobispo de Bahía Blanca;
Mons. Eduardo Martín, arzobispo de Rosario;

Obispos diocesanos
Mons. Jerónimo Podestá, obispo de Avellaneda;
Mons. Alejo Gilligan, obispo de Nueve de Julio;
Mons. Manuel Guirao, obispo de Santiago del Estero;
Mons. Miguel Esteban Hesayne, obispo de Viedma;
Mons. Rómulo García, obispo de Mar del Plata;
Mons. Emilio Bianchi di Cárcano, obispo de Azul;
Mons. José María Montes, obispo de Chascomús;
Mons. Victorio Tomasi, obispo de Nueve de Julio;
Mons. Juan C. Maccarone, obispo de Santiago del Estero;
Mons. Gustavo Help, obispo de Venado Tuerto;
Mons. José H. Suárez, obispo de Gregorio de Laferrere;
Mons. Néstor Navarro, obispo de Alto Valle del Río Negro;
Mons. Carlos Cremata, obispo de Santo Tomé;
Mons. Héctor Romero, obispo de Rafaela;

Obispos auxiliares
Mons. Vicente Adducci, obispo auxiliar de Mercedes;
Mons. Ernesto Segura, obispo auxiliar de Buenos Aires;
Mons. Gerardo Farrel, obispo coadjutor de Quilmes;
Mons. Herberto Ángelo, obispo auxiliar de Mercedes.

Al servicio de la cultura
Dice el padre Segovia: “A grandes trazos podríamos recordar que en las paredes del seminario platense se gestó la “Biblia platense”, obra de aquel maestro incomparable que fue monseñor Straubinger, víctima del nazismo; que allí monseñor Enrique Rau escribió la mejor parte de una vasta producción teológica; que la Juventud Obrera Católica (JOC) tuvo allí su casa madre; que el renacimiento tomista tuvo en ese centro su artífice en monseñor Derisi quien también, desde allí, fue dando forma al sueño de la universidad católica; que un fecundo movimiento litúrgico, con monseñor Segura a la cabeza, en él comenzó, tendríamos motivos para justificar lo dicho.

“¿Quién sabe -o recuerda- que en un momento dado del seminario San José salían, al mismo tiempo, la “Revista de Teología”, la “Revista Bíblica”, “Sapientia”, “Notas de Pastoral Jocista”, “Psállite”, así como los Cursos de Cultura Católica y los primeros Seminarios Catequísticos. Hasta la empresa -por cierto, audaz- de la publicación de un diario que no por efímera fue menos importante como el mismo nombre lo dice: “Surco”?

El Seminario San José tiene su sede en la calle 24, Nº 1630, La Plata.+