Viernes 19 de abril de 2024

El Papa a los vicentinos: Difundan por todo el mundo el amor de Dios

  • 14 de octubre, 2017
  • Ciudad del Vaticano
"Les deseo que no se detengan, sino que prosigan sacando cada dí­a de la adoración el amor de Dios y lo difundan por todo el mundo a través del buen contagio de la caridad, de la disponibilidad, de la concordia. Los bendigo a todos y a los pobres que encuentren", dijo esta mañana el papa Francisco a las miles de personas congregadas en la Plaza de San Pedro con motivo del Simposio Internacional de la Familia Vicentina por el 400° aniversario del carisma de San Vicente de Paúl.
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"Les deseo que no se detengan, sino que prosigan sacando cada dí­a de la adoración el amor de Dios y lo difundan por todo el mundo a través del buen contagio de la caridad, de la disponibilidad, de la concordia. Los bendigo a todos y a los pobres que encuentren", dijo esta mañana el papa Francisco a las miles de personas congregadas en la Plaza de San Pedro con motivo del Simposio Internacional de la Familia Vicentina por el 400° aniversario del carisma de San Vicente de Paúl.

El Santo Padre les dirigió un discurso en el que reflexionó sobre el carisma vicentino apoyado en profundizar tres verbos: adorar, acoger y andar.

La oración, explicó el Papa, se sustenta en la oración, una oración que implique situarse delante de Dios para colocarle en el lugar principal de la vida de todo cristiano.

El Papa recordó las "innumerables iniciativas de San Vicente de Paul dirigidas a cultivar la vida interior y a dedicarse a la oración que purifica y abre el corazón. Para él la oración era esencial. Es la brújula de cada dí­a, como un manual de vida".

"Una vez descubierta, la adoración se vuelve irrenunciable porque es pura intimidad con el Señor, que da paz y alegrí­a, y deshace los sufrimientos de la vida", aseguró Francisco.

Seguidamente añadió el pontí­fice: "Cuando escuchamos esta palabra, acoger, se nos viene rápidamente la idea de que hay que hacer algo. Pero en realidad, acoger es una disposición más profunda: no exige solo hacer sitio a alguien, sino ser una persona acogedora, disponible, habituada a darse a los demás", destacó el obispo de Roma.

"El cristiano que acoge ?aseguró el Papa? es un verdadero hombre o mujer de Iglesia, porque la Iglesia es madre, y una madre acoge la vida y la acompaña".

Por último, el verbo "andar" está estrechamente vinculado con el amor al prójimo, porque "quien ama no está en el sofá mirando, esperando a que llegue un mundo mejor, sino que, con entusiasmo, con sencillez, se levanta y se pone en camino", explicó el papa Francisco.

"San Vicente lo explicó bien: ´Nuestra vocación es andar, no sólo en una parroquia ni tampoco en una diócesis, sino por toda la tierra´. ¿Y para hacer qué? A encender los corazones de los hombres, haciendo aquello que hizo el Hijo de Dios, Él que vino a traer el fuego al mundo para encenderlo con su amor".+

» Texto completo del discurso del Santo Padre