Miércoles 24 de abril de 2024

El Año de la Misericordia ya se vive en las diócesis argentinas

  • 17 de diciembre, 2015
  • Buenos Aires (AICA)
Siguiendo los pasos del papa Francisco, que el domingo abrió la Puerta Santa de la basílica romana de San Juan de Letrán, los obispos argentinos también realizaron el pasado fin de semana el gesto de apertura de las puertas santas en sus respectivas catedrales. Los prelados recordaron en sus homilías que al peregrinar a los templos jubilares diocesanos y traspasar la Puerta Santa, los fieles podrán ganar la indulgencia plenaria, y alentaron a realizar obras de misericordia corporales y espirituales durante este tiempo de gracia.
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Siguiendo los pasos del papa Francisco, que el domingo abrió la Puerta Santa de la basílica romana de San Juan de Letrán, los obispos argentinos también realizaron el pasado fin de semana el gesto de apertura de las puertas antas en sus respectivas catedrales.

Los prelados recordaron en sus homilías que al peregrinar a los templos jubilares diocesanos y traspasar la Puerta Santa, los fieles podrán ganar la indulgencia plenaria, y alentaron a realizar obras de misericordia corporales y espirituales durante este tiempo de gracia.

Mons. Agustín Radrizzani SDB (Mercedes-Luján): "La semejanza es la medida del amor, por concentrarlo lo amamos y porque lo amamos, lo imitamos. Esta imitación de Jesús significa que nosotros alejaremos de nosotros todo tipo de discriminación, alejaremos de nosotros todo tipo de indiferencia. Trataremos de amar a aquellos que nos rodean, uno por uno, descubriendo lo positivo que tienen los hermanos que nos rodean. Y amando a todos, siempre, sin excluir a nadie. Entonces esa misericordia que vivo, por Dios misericordioso, es lo que transforma el ambiente en el que vivo".

Mons. Carlos Humberto Malfa (Chascomús): "Las obras de misericordia son el Evangelio vivo. Así obra Dios, así estamos llamados a obrar nosotros, misioneros de la misericordia: ´Misericordiosos como el Padre?. Seamos los nuevos samaritanos de este tiempo, que necesita de la misericordia de Dios, lo necesita la Iglesia hacia adentro, necesita vivir, experimentar esta misericordia, y necesita también salir da los cruces de los caminos para mostrar a todos los que buscan y a los que no buscan también el rostro del amor misericordioso de Dios". Texto completo de la homilía

Mons. Carlos Tissera (Quilmes): "En la parábola del Hijo Pródigo, el padre se anticipa al relato del hijo, lo abrazo y manda a hacer una fiesta porque ha recuperado la hijo perdido. No alcanzamos a imaginar la alegría de ese hijo, de poder pasar el umbral de la puerta de la casa paterna. En este Año Santo, es tiempo de perdonar, de dejarse perdonar y de perdonarse".

Mons. Jorge Lozano (Gualeguaychú): "Entrar por la puerta es un signo de la Iglesia de puertas abiertas a la cual el papa Francisco nos llama. Una Iglesia en salida. Abrimos la puerta para entrar pero para que nosotros también salgamos de otra manera. Anunciamos una Iglesia misionera, una Iglesia que dé testimonio de la misericordia con que Dios trata a sus hijos? La dinámica de este año es de cercanía para con todos nuestros hermanos, que el mismo Francisco llama las periferias existenciales dramáticas a las que muchos hermanos nuestros han sido empujados en esta sociedad".

Mons. Rubén Frassia (Avellaneda-Lanús): "Este Año Santo es un año de esperanza, un año de gozo interior, un año de saber que Dios es capaz y quiere besar de nuevo nuestra alma porque quiere que nos revistamos de su gracia. Así vendrán las obras de misericordia, las obras corporales, las obras espirituales y otras obras. Y llega una pregunta: ¿qué tengo que hacer?, ¿qué tengo que hacer para decir que creo?, ¿y qué tengo que hacer para decir que sé lo que es amar? Que cada uno se haga la pregunta y dé una respuesta". Texto completo de la homilía

Mons. César Daniel Fernández (Jujuy): "Hay que celebrar con alegría este Año de la Misericordia, dejándose perdonar por Dios y aprendiendo a reconciliarse con los hermanos. La misericordia es la definición de Dios y tenemos que dejar de lado esa idea de ?Dios policía?, que quizá aprendimos de niños cuando nos decían ?Dios te ve? y recordar siempre que Dios no es vigilante sino un Padre lleno de misericordia que siempre nos mira con bondad".

Mons. Gustavo Help (Venado Tuerto): "Deseamos que este Jubileo sea una experiencia de misericordia para sentir más cerca de cada uno el amor de Dios que nos acoge como Padre a todos y no excluye a ninguno".+