Viernes 19 de abril de 2024

Doble fiesta en la ciudad chaqueña de Castelli

  • 5 de agosto, 2015
  • Juan José Castelli (Chaco)
Los fieles de Castelli celebraron doblemente el domingo 2 de agosto al dar gracias a Dios por los 70 años de la capilla San Juan Bautista, erigida a unos 10 kilómetros del ejido urbano, y por los 50 años de sacerdocio del padre Alberto Ulrich, vecino del barrio e hijo de los colonos que construyeron la iglesia.
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Los fieles de Castelli celebraron doblemente el domingo 2 de agosto al dar gracias a Dios por los 70 años de la capilla San Juan Bautista, erigida a unos 10 kilómetros del ejido urbano, y por los 50 años de sacerdocio del padre Alberto Ulrich, vecino del barrio e hijo de los colonos que construyeron la iglesia.

Para celebrar ambos aniversarios visitó la capilla monseñor Gustavo Montini, obispo auxiliar de San Roque de Presidencia Roque Sáenz Peña. El prelado destacó la tarea realizada por inmigrantes alemanes del Volga, que se radicaron en esa zona antes de la fundación del pueblo.

La construcción de una capilla fue una de las primeras preocupaciones que tuvieron los alemanes, aun cuando eran tiempos difíciles y escaseaban muchas cosas. Si bien las primeras celebraciones se realizaron en un templete improvisado con ladrillos de adobes sin cocer, con empeño y colaboración de todos los vecinos -y la guía de los sacerdotes-, en 1945 se pudo inaugurar un templo digno para celebrar la misa, rezar y recibir los sacramentos.

La comunidad vio a algunos de sus hijos consagrarse al servicio de Dios y de la Iglesia. Es el caso del padre Alberto Ulrich CSsR, vecino de la capilla e hijo de colonos alemanes, que ingresó en el seminario de los Padres Redentoristas en Bella Vista, Buenos Aires, y recibió la ordenación sacerdotal el 11 de julio de 1965.

El padre Ulrich desempeñó diversos encargos pastorales en distintos puntos del país. Actualmente continúa un intenso apostolado al norte de Córdoba: es párroco de San Francisco del Chañar, en la prelatura de Deán Funes.

En su homilía, Monseñor Montini agradeció la posibilidad de celebrar esta doble acción de gracias y reflexionó sobre el don de la fe, como una de las obras que Dios realiza en el hombre. Destacó, en primer lugar, que la fe es un regalo recibido, un don, algo que otros nos transmitieron, aquello que Dios sembró en nosotros a través de una familia y de una comunidad concreta.

En segundo lugar, el prelado resaltó que se debe cuidar el don de la fe y se la debe cultivar como una semilla que se siembra. También sostuvo que la fe es un don que se debe transmitir, y solicitó especialmente a los padres que garanticen a sus hijos recibir tan precioso don para sus vidas.

Luego de la celebración eucarística, los fieles de la capilla y algunos familiares del padre Ulrich brindaron un almuerzo comunitario. Monseñor Montini saludó a los presentes y compartió el agasajo, junto con los sacerdotes que concelebraron.

Además del obispo y del anciano sacerdote, estuvieron presentes los sacerdotes José Luis Steeman, párroco de Castelli; Raúl Rodríguez y Orlando Verón, vicarios de Castelli, y el padre Walter Groh, vicario de Tres Isletas y oriundo de Castelli.

El intendente Alberto Nievas, y el presidente del Consejo Municipal, Pío Sander, asistieron a los actos conmemorativos.+