La Iglesia pidió no "criminalizar" al adicto y advirtió sobre la "tolerancia social" a las drogas

  • 10 de junio, 2013
  • Buenos Aires (AICA)
La Pastoral Nacional sobre Drogadependencia pidió hoy "no criminalizar?al adicto, sino "escucharlo y recibirlo para acompañarlo en un camino que le permita tener una vida digna, vivida en libertad y en plenitud", y advirtió acerca de la "creciente tolerancia social" y disminución de la "percepción del riesgo" al consumo de estupefacientes. Tras reconocer que no hay "recetas mágicas", expresan que "trabajando juntos, poniendo el esfuerzo en acciones concretas, podremos avanzar significativamente en la ?reducción de los daños? que provoca la droga" y exhortó a que los credos, el Estado y la sociedad civil trabajen "juntos, apoyando a las familias que son la principal barrera contra la droga". También criticó que "más allá de los avances significativos en materia de inclusión social que se realizaron en los últimos tiempos, todavía falta mucho. Percibimos una ausencia histórica y estructural del Estado frente a esta situación y no se trata de ningún gobierno en particular, sino de algo qu
La Pastoral Nacional sobre Drogadependencia pidió hoy "no criminalizar" al adicto, sino "escucharlo y recibirlo para acompañarlo en un camino que le permita tener una vida digna, vivida en libertad y en plenitud", y advirtió acerca de la "creciente tolerancia social" y disminución de la "percepción del riesgo" al consumo de estupefacientes. "Los problemas vinculados al consumo de drogas son cada vez más preocupantes. No solamente por la evolución del consumo y el tráfico, la demanda y la oferta, sino fundamentalmente porque están relacionados con episodios que afectan sensiblemente a la sociedad en su conjunto", subrayó. "La magnitud del problema es tan alarmante que aparecen expresiones en todo el mundo que hacen pensar que la lucha está perdida", agregó. El organismo episcopal presentó, en la sede de la Conferencia Episcopal Argentina, el documento "No criminalicemos al adicto" ante la proximidad del 26 de junio, establecido por Naciones Unidas como Día Internacional de la Lucha contra el uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas. En la introducción del texto, se incluyen palabras del cardenal Jorge Mario Bergoglio, en las que el hoy papa Francisco aseveraba que "la sociedad anula a las víctimas de las drogas, y las hace sobrantes". La rueda de prensa estuvo a cargo de monseñor Jorge Lozano, obispo de Gualeguaychú y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social; Horacio Reyser, coordinador de la Comisión de Drogadependencia; el diácono permanente Horacio Castellano, miembro de la misma Comisión por la diócesis de Avellaneda-Lanús y el presbítero José María "Pepe" Di Paola, miembro de la Comisión por la diócesis de San Martín. La Comisión sostuvo que "el camino de la criminalización del adicto empieza mucho antes. Y nuestra sociedad no está exenta de transitarlo. Se inicia cuando la contención es insuficiente en los espacios comunitarios o en el ámbito de la educación formal y no formal. Cuando son escasas las oportunidades de inclusión social y no se ofrecen propuestas que den una verdadero sentido de la vida a los jóvenes más pobres. Cuando se les dificulta en lo cotidiano el acceso a la salud y a la justicia". "Poco ayuda cuando los medios de comunicación nos imponen una mirada estigmatizante de los jóvenes: pobres, adictos, delincuentes y peligrosos. Todo esto es parte del camino de la criminalización del adicto. Por eso todos somos parte, ningún actor o sector podría decir que no está en este camino", indicó. Tras reconocer que no hay "recetas mágicas", expresan que "trabajando juntos, poniendo el esfuerzo en acciones concretas, podremos avanzar significativamente en la ?reducción de los daños? que provoca la droga". Exhortó en este sentido a que los credos, el Estado y la sociedad civil trabajen "juntos, apoyando a las familias que son la principal barrera contra la droga". La Comisión valoró que se haya frenado el debate legislativo para despenalizar el consumo, dado que en los proyectos presentados se detectó cierto "apuro y superficialidad" en pos de aprobarlos. También criticó que "más allá de los avances significativos en materia de inclusión social que se realizaron en los últimos tiempos, todavía falta mucho. Percibimos una ausencia histórica y estructural del Estado frente a esta situación y no se trata de ningún gobierno en particular, sino de algo que como sociedad no terminamos de asumir, de encontrarle la vuelta". Desde la Pastoral sobre Drogadependencia de la Iglesia Católica Argentina sostuvieron que "en el centro del problema no están las sustancias, sino el ser humano, la persona que se droga", por eso, reiteró: "¡No criminalicemos a nuestros hermanos que sufren por las drogas!"+