'Preservar la voz y el rostro humano', tema de la Jornada de las Comunicaciones Sociales

  • 29 de septiembre, 2025
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Este lema hace referencia a los desafíos actuales en el mundo de las comunicaciones, relacionados principalmente con la automatización de la comunicación y el desarrollo de la IA.

"Preservar la voz y el rostro humano" es el tema de la 60ª Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, que se celebrará el 17 de mayo de 2026, domingo anterior a Pentecostés, anunció este lunes el Dicasterio para la Comunicación.

En un comunicado el Dicasterio, afirma que "en los ecosistemas de comunicación actuales, la tecnología influye en las interacciones más que nunca, desde los algoritmos que controlan los canales de noticias hasta la inteligencia artificial que crea textos y conversaciones completos".

Reconociendo que los avances tecnológicos ofrecen "posibilidades inimaginables hace apenas unos años", el Dicasterio advierte que dichas herramientas "no pueden sustituir las capacidades exclusivamente humanas de empatía, ética y responsabilidad moral".

El comunicado pública, dice, "requiere criterio humano, no solo patrones de datos". 

Por lo tanto, "el reto es garantizar que la humanidad siga siendo el agente rector. El futuro de la comunicación debe ser uno en el que las máquinas sirvan como herramientas que conecten y faciliten la vida humana, en lugar de erosionar la voz humana".

Preocupaciones por los riesgos asociados a la IA
El anuncio del lunes advierte sobre los riesgos reales asociados con la tecnología moderna: "La IA puede generar información atractiva pero engañosa, manipuladora y dañina; replicar sesgos y estereotipos a partir de sus datos de entrenamiento; y amplificar la desinformación mediante la simulación de voces y rostros humanos. También puede invadir la privacidad e intimidad de las personas sin su consentimiento".

Esas preocupaciones resaltan la urgencia de introducir la "alfabetización mediática" o incluso la "alfabetización mediática e inteligencia artificial (MAIL)" en los sistemas formales de educación, afirma la declaración.

El Dicasterio concluye que, como católicos, tenemos grandes oportunidades. Al mismo tiempo, los riesgos son reales. La IA puede generar información atractiva pero engañosa, manipuladora y dañina, replicar sesgos y estereotipos a partir de sus datos de entrenamiento y amplificar la desinformación mediante la simulación de voces y rostros humanos. También puede invadir la privacidad e intimidad de las personas sin su consentimiento. La dependencia excesiva de la IA debilita el pensamiento crítico y las capacidades creativas, mientras que el control monopolizado de estos sistemas plantea inquietudes sobre la centralización del poder y la desigualdad.

La necesidad de la alfabetización mediática
En el comunicado que anuncia el tema de este año, el Dicasterio para la Comunicación señala que es esencial promover la "alfabetización mediática" frente al rápido avance de tecnologías como la inteligencia artificial.

"Como católicos, podemos y debemos dar nuestra contribución para que las personas, especialmente los jóvenes, adquieran la capacidad de pensamiento crítico y crezcan en la libertad de espíritu", explica la declaración, y añade: "Por ello, se ha vuelto urgente introducir la alfabetización mediática en los sistemas educativos, o incluso la alfabetización mediática e inteligencia artificial".+