Mons. Canecín: 'Ayudemos a cuidar la vida de nuestros jóvenes'

  • 26 de septiembre, 2025
  • Goya (Corrientes)
El obispo de Goya presidió la fiesta patronal en honor a la Virgen de las Mercedes y también animó al Pueblo de Dios a "propiciar la cultura de la prevención en todos los órdenes y niveles".

El obispo de Goya, monseñor Adolfo Canecín, acompañó a la comunidad de la ciudad de Mercedes en la celebración de sus fiestas patronales en honor a la Virgen.  

En su homilía, el prelado recordó la victoria del 24 de septiembre de 1812, cuando Manuel Belgrano puso al Ejército bajo la custodia de la Virgen, y tras la batalla le entregó el bastón de mando en reconocimiento de su celestial intervención. Como gesto y recordatorio de ese momento, en Mercedes y por iniciativa de la Asociación Belgraniana, se colocó en las manos de la Virgen una rosa construida por un orfebre. 

Haciendo referencia a la rosa que entregaron a la Virgen de las Mercedes, monseñor Canecín invitó a reflexionar con la pregunta: "¿Qué hay dentro mío que hoy tiene que ser convertido y transformado? Como el metal es transformado en el fuego del orfebre, tiene que ser transformado por el fuego del Espíritu para ser transformado en una rosa de la paz".

"Qué lindo que cada uno de nosotros hoy -continuó el pastor diocesano- pueda decir lo que tenemos para que sea transformado como el metal, en una rosa de la paz. Que la paz reine siempre en el corazón de cada uno, en el departamento de Mercedes, y desde aquí pueda reinar la paz en el mundo". 

Seguidamente, el prelado se refirió al flagelo del suicido, en una día en que también hubo gran consternación en la ciudad por fallecimiento de una joven que decidió quitarse la vida. "Pensemos en esta realidad social departamental y de la diócesis y pidamos que la intercesión de la Virgen nos ayude a ser libres de estas ataduras", manifestó el prelado. 

Al hacer referencia al suicidio, señaló que son situaciones que "desconciertan y duelen, y en ese sentido es importante unirnos, acompañarnos y prestar ayuda", al tiempo en que afirmó: "Se ha recrudecido la esclavitud de la trata de personas. Ni en la época antigua se daba lo que vemos hoy: no desaparecían niños como Ramoncito, Loan y Lian" planteó Canecin.

Advirtió también que "nunca se han dado estas problemáticas sociales con la agudeza que se dan hoy, como el flagelo de las adicciones, donde vemos tantas situaciones que nos están matando. También los accidentes de tránsito: cuántas familias se van perdiendo".

Vivir en medio de una cultura de muerte
Monseñor Canecín recordó el acompañamiento a la familia de Tati, en su casa, "donde pude rezar el responso. Todo esto nos está indicando que estamos viviendo en medio de una cultura de muerte. Hoy, en medio de tantos avances tecnológicos, vemos la inteligencia artificial, pero también tenemos que discernir hasta dónde es algo ético y moral, para saber utilizar bien lo que es obra del ingenio humano".

"A veces creemos que el éxito está en saber manejar la tecnología, pero no me conozco a mí mismo, no sé manejar mi carácter, mi temperamento, no sé dominar mi lenguaje, la ira y un montón de cosas", subrayó, asegurando que "el verdadero progreso va por otro lado: esa capacidad de autodominio es más importante que saber manejar la tecnología".

Finalmente, el obispo de Goya se encomendó a la Nuestra Señora de las Mercedes, "nuestra patrona de la esperanza, para que nos ayude a que todos digamos: '¿Yo qué puedo ofrece?'. Qué lindo que nosotros pensemos cuál va a ser el pétalo que brote de mi tiempo, creatividad, don y talento para la paz y para la vida de nuestro pueblo". 

"Ayudemos a cuidar la vida de nuestros jóvenes, propiciando la cultura de la prevención en todos los órdenes y niveles", enfatizó.+