Mons. Urbanc clausuró la Semana Bíblica: 'La Palabra de Dios alimenta la esperanza'
- 12 de septiembre, 2025
- San Fernando del Valle de Catamarca (AICA)
Mons. Luis Urbanc presidió la misa de clausura en la capilla del santuario. Exhortó a los fieles a "no bajar los brazos, profundizar y meditar la Palabra de Dios todos los días, porque es inagotable".

Con una peregrinación jubilar, una conferencia sobre el beato Mamerto Esquiú y la celebración de la Eucaristía, se clausuró el jueves 11 de septiembre la Semana Bíblica Diocesana en el santuario de la Gruta de la Virgen del Valle.
La propuesta, organizada por la Pastoral de Animación Bíblica en el marco del Mes de la Biblia, se inscribió en el Jubileo Ordinario convocado por el papa Francisco con motivo de los 2025 años del nacimiento de Jesucristo, y en el 60° aniversario de la Constitución Dogmática Dei Verbum del Concilio Vaticano II.
La jornada comenzó con la peregrinación jubilar desde la plaza de la Virgen hasta la Gruta, donde los fieles atravesaron la Puerta Santa para obtener las indulgencias propias de este Año Jubilar. Posteriormente, en el salón del subsuelo del Santuario, se desarrolló la conferencia "El beato Mamerto Esquiú y las Sagradas Escrituras", a cargo del Prof. Mario Vera y la Lic. Sandra Solohaga.
La disertación puso de relieve cómo la Palabra de Dios fue alimento espiritual y fuente de inspiración para Esquiú en su servicio pastoral y social. Se destacaron sus sermones, particularmente el de la jura de la Constitución Argentina en 1853, y su compromiso con la pacificación de una patria convulsionada. También se recordó la tarea de su hermano Odorico, quien en 1889 contribuyó a localizar la gruta de la Virgen, cubierta durante siglos por la vegetación.
Los días previos, entre el lunes 8 y el miércoles 10, se había desarrollado la formación bíblica con presentaciones sobre los distintos capítulos de Dei Verbum, a cargo de especialistas y sacerdotes en el Centro Educativo y Cultural Diocesano Virgen del Valle.
"Estudiar, escuchar, leer y rezar la Palabra"
El obispo de Catamarca, monseñor Luis Urbanc, presidió la misa de clausura en la capilla del subsuelo del santuario, concelebrada por el padre Rogelio Suárez, delegado diocesano para la Pastoral de Animación Bíblica.
En su homilía, recordó la enseñanza de san Jerónimo: "Desconocer las Escrituras es desconocer a Cristo", y lamentó que "la inmensa mayoría de nuestros católicos desconozca la Biblia". Explicó que la Palabra debe ser acogida con fe, profundizada a la luz del Espíritu Santo y rezada: "En la oración se produce el diálogo entre Dios y la criatura humana, y ahí cumple su cometido".
Subrayó que la Biblia no puede leerse como una novela, porque es la expresión del acompañamiento de Dios a su pueblo. "Dios en su divina providencia quiso que su palabra quedara consignada por escrito y en manos del Magisterio de la Iglesia, para una interpretación correcta", señaló.
Refiriéndose al Evangelio proclamado, destacó la fuerza revolucionaria de las bienaventuranzas: "Jesús nos invita a perdonar y a ser misericordiosos como el Padre del Cielo. Pero nuestra recompensa no está en este mundo, sino en la eternidad. La Palabra de Dios alimenta la esperanza, y la virtud de la esperanza es fundamental en la vida cristiana".
El obispo exhortó a los fieles a "no bajar los brazos, profundizar y meditar la Palabra de Dios todos los días, porque es inagotable. Cuántas veces leemos un texto y siempre nos dice algo nuevo; y cuando se interpreta en comunidad, mejor todavía".
Un cierre festivo y fraterno
En la misa se rezó especialmente por los maestros en su día, y al concluir, los presentes saludaron a la Virgen del Valle con cantos. Finalmente, el padre Santiago Granillo compartió un brindis fraterno junto a docentes, catequistas y fieles que participaron de esta semana dedicada a redescubrir el valor de la Palabra de Dios.+