Patriarcas católicos y greco-ortodoxos de Jerusalén visitan Gaza

  • 18 de julio, 2025
  • Jerusalén (Tierra Santa) (AICA)
El cardenal Pierbattista Pizzaballa y el patriarca Teófilo III encabezan la delegación eclesiástica a Gaza tras el ataque a la comunidad de la parroquia Sagrada Familia.

El patriarca latino de Jerusalén y el patriarca griego ortodoxo de Jerusalén llegaron hoy a Gaza como parte de una delegación eclesiástica para expresar la "solicitud pastoral" compartida por las Iglesias de Tierra Santa y su preocupación por la comunidad cristiana.

"Tras el grave ataque al recinto de la Iglesia de la Sagrada Familia en Gaza, Su Beatitud el cardenal Pierbattista Pizzaballa, Patriarca Latino de Jerusalén, junto con Su Beatitud Teófilos III, patriarca Griego Ortodoxo de Jerusalén, llegaron a Gaza esta mañana", dijo el Patriarcado Latino de Jerusalén (Iglesia Católica) en un comunicado publicado hoy.

La Iglesia de la Sagrada Familia, sede de la única parroquia católica de Gaza, fue atacada por soldados israelíes, dejando un muerto y varios heridos, el jueves por la mañana.

En Gaza, Palestina, la delegación eclesiástica, se reunirá con miembros de la comunidad cristiana local, "ofrecerá condolencias y solidaridad", y estará "al lado de las personas afectadas por los recientes acontecimientos".

El Patriarcado Latino de Jerusalén es responsable de la única parroquia católica en la Franja de Gaza, y el cardenal Pierbattista Pizzaballa evaluará personalmente las necesidades humanitarias y pastorales de la comunidad, con el objetivo de ayudar a guiar la presencia y la respuesta continuas de la Iglesia.

"Oramos por la seguridad de la delegación y por la suspensión de las actividades militares durante la visita", expresa el comunicado.

El ataque militar israelí contra la Iglesia Católica de la Sagrada Familia en Gaza dejó varios muertos y heridos, algunos de gravedad. El párroco, Gabriel Romanelli IVE, fue uno de los heridos. La iglesia, que aún alberga a unas 500 personas que huyeron de la guerra, sufrió graves daños.

El Patriarcado Latino "garantizó la evacuación de los heridos en el ataque" este jueves a "instituciones médicas fuera de Gaza, donde recibirán atención", y a petición del cardenal Pierbattista Pizzaballa, en coordinación con socios humanitarios, también se garantizó el acceso para "asistencia esencial no solo a la comunidad cristiana, sino al mayor número posible de familias", que incluye "cientos de toneladas de material alimentario, así como botiquines de primeros auxilios y equipos médicos urgentemente necesarios".

El Patriarcado Latino se mantiene firme en su compromiso con la comunidad cristiana y toda la población de Gaza. No serán olvidados ni abandonados.

Solidaridad y cercanía de Cáritas
Por su parte Cáritas Internacional también expresó en un comunicado su "profundo pesar y condolencias" tras el bombardeo israelí de la Iglesia de la Sagrada Familia en Gaza.

"Estamos devastados por este último ataque contra personas que simplemente intentaban sobrevivir y se refugiaron en la iglesia. Sus muertes son un doloroso recordatorio de las terribles condiciones en las que viven los civiles y los profesionales de la salud bajo asedio. Lamentamos las vidas perdidas y hacemos un llamamiento a todas las partes para que respeten la sacralidad de la vida y los espacios que la protegen", declaró Alistair Dutton, secretario general de Cáritas Internationalis.

Un miembro del equipo de Cáritas Jerusalén en Gaza recordó que el párroco de la única parroquia católica de Gaza pidió la semana pasada a la gente que permaneciera en sus habitaciones, ya que los "intensos bombardeos y operaciones militares" en las cercanías estaban haciendo la zona cada vez más peligrosa, por lo que el ataque del jueves podría "haber perdido entre 50 y 60 personas; habría sido una masacre".

Cáritas Internacional informa que entre los muertos en este ataque del ejército israelí se encuentran el conserje de la parroquia, Saad Salameh, de 60 años, que se encontraba en el patio, la señora Fumayya Ayyad, de 84 años, que recibía apoyo en una carpa psicosocial de Cáritas, y Najwa Abu Daoud, de 69 años, que estaba sentada cerca de Fumayya Ayyad, "cuando la explosión esparció metralla y escombros por toda la zona".

La organización católica internacional expresa su plena solidaridad con Cáritas Jerusalén y todos sus socios que trabajan bajo asedio para servir a personas en extrema necesidad, y pide respeto y protección de los lugares de culto y refugios humanitarios, como lo exige el Derecho Internacional Humanitario, y garantizar el acceso sin restricciones a la ayuda humanitaria, corredores seguros y apoyo médico para los civiles.

"Detener todos los ataques contra los civiles, especialmente contra aquellos que buscan refugio en iglesias, otros lugares de culto y espacios humanitarios claramente señalizados; defender la dignidad humana, que nunca debe ser víctima de la guerra", son otros llamamientos de la confederación Cáritas.

A principios de este mes, Cáritas Jerusalén denunció el aumento de la violencia en Gaza por parte de las fuerzas militares israelíes, afirmando que los habitantes del enclave palestino están "obligados a elegir entre la muerte y la muerte"; alrededor de 400 personas se refugiaron en la iglesia de la Sagrada Familia, incluidos 15 empleados de Cáritas y sus familias.+