P. Hernández: "Esperemos que esta paz sea realmente estable y duradera"

  • 22 de noviembre, 2012
  • Franja de Gaza
La tregua se respeta a partir de hoy, jueves 22 de noviembre, en la Franja de Gaza, después del acuerdo de la víspera entre Israel y la organización palestina Hamas, que controla Gaza, con lo que se pone fin a una semana de enfrentamientos armados que costaron la vida de 155 palestinos y 5 israelíes. El sacerdote argentino Jorge Hernández, párroco de la iglesia católica de Gaza, lo celebra junto con sus feligreses.
La tregua se respeta a partir de hoy, jueves 22 de noviembre, en la Franja de Gaza, después del acuerdo de la víspera entre Israel y la organización palestina Hamas, que controla Gaza, con lo que se pone fin a una semana de enfrentamientos armados que costaron la vida de 155 palestinos y 5 israelíes. El sacerdote argentino Jorge Hernández, párroco de la iglesia católica de Gaza, lo celebra junto con sus feligreses. "Con grandísima alegría, y no podía ser de otro modo, fue recibida la noticia del alto del fuego acordada en horas de la noche de ayer. La población salió a la calle. Inmediatamente se hicieron sentir los disparos de fiesta. Las visitas a los familiares, a los lugares destruidos, la vuelta a la propia casa, esté como esté, etc., son signos y expresión del deseo que reina en la gente de obtener paz", relata el padre Jorge Hernández, sacerdote del Instituto del Verbo Encarnado (IVE y párroco de la Sagrada Familia, la única iglesia católica en Gaza. "Era indispensable un alto del fuego. La situación era terrible y al mismo tiempo horrorosamente ridícula. ¿Cómo se podrá justificar la masacre de vidas inocentes? ¿Quién se hará responsable de todo esto?", se pregunta el sacerdote argentino quien además señala que "esta guerra engendró un odio y un grado de violencia que es realmente difícil de definir". El padre Hernández reflexiona sobre la posibilidad de solución a tan largo y doloroso conflicto: "Lo sabemos, la única solución es el perdón. Hablar de perdón en estas circunstancias podría sonar extraño, pero el perdón cristiano, supuesta la justicia, es realmente la única solución real a este conflicto, en orden a la consecución de una paz auténtica y estable. Nunca se podrá hablar de paz si no se restaura antes la justicia y tampoco habrá paz verdadera, seria e interior, si no se sanan antes las profundas heridas de los odios, rencores y deseos de venganza". Inmediatamente establecido el alto el fuego, relata el párroco de la Sagrada Familia que comenzaron las comunicaciones telefónicas con nuestros parroquianos y que fue realmente edificante la actitud de esta gente "su fortaleza y resignación. Todos a una recitaban el ?alhamdu lilla!? (¡alabado sea Dios!), que significa también ¡gracias a Dios! y que implica una resignación total a los designios de la divina Voluntad. Es un canto de alabanza. Y ese canto de alabanza, fue la primera cosa oída después de una semana de terribles bombardeos. Realmente es edificante". Finalmente el sacerdote agradece las oraciones y el apoyo de tantas personas de todo el mundo que los acompañaron y manifestaron su cercanía en estos momentos difíciles, especialmente agradece al Patriarca Foad Twal, quien "personalmente se preocupó por los cristianos en Gaza". "Un agradecimiento y reconocimiento especial, añadió el sacerdote, merecen las religiosas que están en Gaza: las Hermanas del Rosario de Jerusalén, las Misioneras de la Caridad y las Servidoras del Señor y de la Virgen de Matará. Sus rezos, oraciones y su mismo testimonio son una bendición para nuestra parroquia y Dios sabrá recompensarles tanta generosidad". "En estos días pedíamos oraciones por la paz, y nuestro Señor Jesucristo, Príncipe de la paz, nos la concedió el día en que festejábamos la memoria de la Virgen Santísima. Dios derramó sus gracias a través de la siempre Virgen María, nuestra Señora. Que su santo manto bendiga y proteja Gaza", concluyó.+