Profesión perpetua de un salesiano: un llamado de amor y servicio

El hermano Esteban Cano Vasco SDB ratificó su compromiso de servicio a Dios y a los jóvenes más vulnerables, al realizar sus votos definitivos en el santuario María Auxiliadora de Mendoza.

El Hermano Esteban Cano Vasco, miembro de la congregación salesiana, realizó su profesión perpetua en una ceremonia solemne celebrada en el santuario María Auxiliadora de Rodeo del Medio, Mendoza. Este acto marcó un hito significativo en su vida religiosa, consolidando su compromiso de dedicación a la labor pastoral y educativa, especialmente hacia los jóvenes más vulnerables.

La misa, presidida por el padre inspector de Argentina Norte, Horacio Barbieri SDB, reunió a familiares, amigos y otros hermanos salesianos, quienes acompañaron al hermano Esteban en ese momento clave de su vocación. La profesión perpetua no solo representa un acto formal de compromiso, sino que refleja el resultado de años de discernimiento y formación en la vida salesiana.

En su intervención, el hermano Esteban expresó que este paso es la culminación de un largo proceso de acompañamiento espiritual, señalando que la profesión perpetua para él implica una respuesta concreta al llamado de Dios. "Es un proceso de escucha y reflexión constante, un encuentro con Dios que guía mi vida", destacó.

El nuevo salesiano explicó que la decisión de abrazar la vida religiosa y consagrarse plenamente al servicio de los demás no es solo un acto de compromiso, sino una dedicación a una misión que trasciende lo personal. Al referirse a su vocación, subrayó el deseo de vivir en comunidad, en fraternidad con sus hermanos salesianos, y de acompañar a los jóvenes en su búsqueda de sentido y propósito en la vida.

La profesión perpetua es el resultado de un camino de formación y servicio que el hermano Esteban ha recorrido, y su vocación refleja un compromiso profundo con el proyecto educativo y pastoral salesiano, en el que busca ser instrumento de esperanza y transformación para aquellos que más lo necesitan.

Este momento marca un nuevo capítulo en la vida del hermano Esteban, quien continuará dedicando su esfuerzo y dedicación al servicio de Dios y de los jóvenes, guiado por la certeza de que su vocación es parte de un plan divino más amplio y trascendental.+