Mons. Domínguez explica que su renuncia es 'una decisión dolorosa y personal'
- 13 de febrero, 2025
- San Rafael (Mendoza) (AICA)
El obispo, que estuvo al frente de San Rafael durante tres años, expresó un profundo dolor por su decisión, y agradeció al Papa por su confianza y a toda la comunidad diocesana por el apoyo recibido.
La Santa Sede informó, este jueves 13 de febrero, que el Papa Francisco aceptó la renuncia de monseñor Carlos María Domínguez OAR como obispo de San Rafael. El sucesor de Pedro designó como administrador apostólico a monseñor Marcelo Mazzitelli, obispo auxiliar de Mendoza, para continuar con la misión pastoral en esa jurisdicción del sur de la provincia cordillerana.
Monseñor Domínguez, quien estuvo al frente de la diócesis durante tres años -uno como administrador apostólico y dos como obispo diocesano-, expresó en un comunicado su profundo dolor por esta decisión. En sus palabras, el obispo agradeció al Papa por su confianza al nombrarlo para esta misión y a toda la comunidad diocesana por el apoyo recibido.
"Intuyo la perplejidad que cause en todos ustedes esta noticia. Pero, créanme, esta decisión me causa un profundo dolor", expresó el prelado, quien destacó que durante su tiempo al frente de la diócesis, se entregó "con todo el corazón" al servicio pastoral. Agradeció, además, las constantes muestras de afecto y la oración de los fieles, y pidió perdón por las fallas que pudo haber tenido en su gestión.
En su mensaje, monseñor Domínguez expresó: "Los llevo a todos y a cada uno de ustedes en mi corazón: a mis hermanos sacerdotes, a los seminaristas, a los religiosos, religiosas y consagrados, a los laicos y a tantos que Dios puso en mi camino episcopal". También pidió oraciones por él, señalando que en estos momentos, "me hace mucha falta", y aseguró que él seguirá rezando por la diócesis.
La diócesis continuará bajo la guía de monseñor Mazzitelli, quien asumirá el rol de administrador apostólico mientras se espera el nombramiento de un nuevo obispo.
Comunicado completo
Por cuestiones de índole personal he presentado mi renuncia al gobierno pastoral como Obispo diocesano de San Rafael al Santo Padre Francisco a quien le agradezco su confianza cuando me nombró obispo de esta Diócesis.
Intuyo la perplejidad que cause en todos ustedes esta noticia. Pero, créanme, esta decisión me causa un profundo dolor. Durante tres años -uno como Administrador Apostólico y dos como Obispo diocesano- me entregué con todo el corazón a esta Iglesia de San Rafael.
Quiero darles infinitas gracias por las incesantes muestras de afecto y por sentirme siempre acompañado por la oración de todos.
Quiero pedirles perdón por lo que hice mal, por lo que no hice y por lo que no supe hacer.
Los llevo a todos y a cada uno de ustedes en mi corazón: a mis hermanos sacerdotes; a los seminaristas; a los religiosos, religiosas y consagradas; a los laicos y a tantos que Dios puso en mi camino episcopal.
Recen mucho por mí que en estos momentos me hace mucha falta. Yo rezo y rezaré siempre por ustedes y por esta Diócesis a la que amo.
Los encomiendo a nuestra Madre de Lourdes y a la protección angelical de San Rafael. Dios los bendiga.
San Rafael, 12 de febrero de 2025.
+ Fr. Carlos María Domínguez O.A.R., obispo emérito de San Rafael.+