Mar del Plata: cuatro candidatos al diaconado permanente continúan su camino formativo

  • 28 de noviembre, 2024
  • Mar del Plata (Buenos Aires) (AICA)
Adrián Aguirre, Marcelo Elvira, Alejandro Lute y Juan Tisera recibieron el ministerio del lectorado. El administrador apostólico, Mons. Giobando, les pidió "meditar la Palabra para luego anunciarla".

El administrador apostólico de la diócesis de Mar del Plata, monseñor Ernesto Giobando SJ, mantuvo hace unos días un encuentro con cuatro candidatos al diaconado permanente, quienes se congregaron en la catedral de los santos Pedro y Cecilia. 

En la oportunidad, el prelado celebró la Eucaristía y confirió el ministerio del lectorado a Adrián Aguirre, Marcelo Elvira, Alejandro Lute y Juan Tisera, quienes fueron acompañados por sus familias y por también miembros de las comunidades en las que sirven.

Monseñor Giobando recordó que el apóstol Juan "nos dice que fue testigo de la humanidad de Cristo: lo que hemos visto y oído, eso les anunciamos. Los apóstoles contemplaron, tocaron, escucharon al Señor. ¡Verdadero privilegio el de los ellos y el de la primera comunidad cristiana, al igual que el de María, José y el pueblo de Nazaret, donde Jesús vivió, creció y se instruyó en la religión judía! Y es en esa sinagoga de su pueblo donde el Señor proclama al profeta Isaías, tal como escuchamos en el Evangelio recién, y cita esa profecía acerca del mesías y dice Jesús: 'Esto se ha cumplido'".

"La presencia del Señor aquí en la tierra -dijo- no es física, en su cuerpo glorioso y resucitado, pero sí lo podemos contemplar a través de los ojos de nuestra fe y tenemos la certeza de que nos está acompañando; y si nos preguntan: '¿Vos crees en Él?', ¡Sí! '¿Lo has visto?' No, físicamente no, pero el Señor dijo: 'Felices los que creen sin ver', y por esos somos felices, porque creemos en el testimonio de aquellos que lo vieron y en la Palabra que leemos, meditamos y anunciamos", prosiguió.

Dirigiéndose a los futuros diáconos permanentes, el administrador apostólico manifestó: "Hoy instituimos, como lectores, a estos hermanos nuestros, para que puedan leer la Palabra y, junto con esa lectura de la Palabra, también puedan meditarla, que implica adecuar nuestra vida a esa Palabra, para luego preparar el corazón para anunciarla".

"Estos hermanos nuestros están en camino hacia el diaconado permanente, que es una vocación dentro de otra vocación, porque ellos tienen su esposa, sus hijos, su familia, que es la vocación primera. Ahora se preparan para otro 'sí', que es el del diaconado en la diócesis de Mar del Plata, es decir, en el barrio, en la familia, en el trabajo, en aquellos ámbitos donde ellos viven", continuó. 

Acto seguido, señaló que, "si el Espíritu Santo los acompaña en este camino, recibirán el diaconado, algo que seguramente no imaginaban, porque fueron llamados y ese llamado es de Dios a través de las mediaciones humanas, los sacerdotes que han ayudado en este discernimiento, junto a sus esposas y sus familias. Por eso, la iglesia es 'familia de familias' y cada uno, en su lugar, tiene un ministerio". 

"Hoy meditamos sobre el de los diáconos, pero también está el de los catequistas, y además está el oculto, simple, sencillo y a veces desapercibido de la caridad, que es necesario, fundamental en la vida de la Iglesia", finalizó.

Luego de la homilía, tuvo lugar la parte central del rito de institución de lectores, en el que se invitó al pueblo a orar por los candidatos, se les impartió la bendición y se hizo entrega del libro de la Palabra de Dios.+