Mons. García Cuerva: 'Dejémonos evangelizar por los más pobres'

  • 12 de noviembre, 2024
  • Buenos Aires (AICA)
En su reflexión, el arzobispo de Buenos Aires invita a dejarse interpelar por las acciones que se desprenden de las lecturas del último domingo: confiar, compartir, no dar lo que nos sobra y dialogar.

El arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge García Cuerva, al reflexionar sobre las dos mujeres viudas que aparecen en la primera lectura del Libro de los Reyes y en el Evangelio, rescató tres acciones que ellas manifiestan: confiar, compartir y dialogar.

"El otro día, insistíamos con aprender a escucharnos; hoy podríamos pensar cuánto nos falta para dialogar, sin estar esperando que el otro termine de hablar para inmediatamente responderle", planteó. 

El arzobispo porteño recordó que el papa san Pablo VI, hace 60 años, publicó la encíclica Ecclesiam suam, donde planteaba, como un "grandísimo desafío que tenía la Iglesia, el de ser una Iglesia del diálogo".

"Una iglesia que sea capaz de entrar en diálogo y que tenga una misión dialógica con el mundo; que nosotros también cada uno no perdamos la capacidad del diálogo, porque es también capacidad de encuentro con el hermano, como lo tuvieron la viuda y Elías en la primera lectura", subrayó.

"Y, para terminar, una acción de Jesús que creo que no puede pasar desapercibida, y es cuando Jesús observa claramente lo que está haciendo la viuda: dice que miraba cómo la gente depositaba su limosna y luego Él ve que esa mujer pone esas pequeñas monedas de cobre; y entonces llamó a sus discípulos y les dijo, enseñándoles: 'Les aseguro que esta pobre viuda ha puesto más que cualquiera de los otros'", profundizó.

Monseñor García Cuerva destacó que "Jesús presta atención a los pobres, Jesús observa atentamente la conducta de esta mujer pobre y les dice a los discípulos: 'Miren lo que acaba de hacer'. Creo que todos nosotros también tenemos que prestar atención a nuestros hermanos más pobres, porque -como dice Francisco- los pobres nos evangelizan, los más pobres tienen mucho para enseñarnos. Para nosotros no son un número, para nosotros son personas con nombre y apellido, rostros concretos que nos hablan del mismo Jesucristo".

"Damos gracias a Dios, entonces, por las lecturas de este domingo, que nos dejan ser interpelados por estas dos mujeres viudas; ellas nos invitan a confiar, ellas nos invitan a compartir y no dar lo que nos sobra. En la primera lectura, la viuda de Sarepta nos invita a aprender a dialogar con los distintos, como ella lo hace con Elías; y Jesús, en el Evangelio, igual que a los discípulos, nos dice: 'Miren lo que acaban de hacer esta mujer, miren cómo compartió, miren cómo confía en Dios y confía en los demás'. Por eso hoy, Señor, te queremos pedir que también nosotros nos dejemos evangelizar por los más pobres, que también nosotros, haciendo carne el pedido del Papa Francisco, dejemos que los pobres nos enseñen, porque ellos también nos hablan de Evangelio", concluyó.+