Mons. García Cuerva disertó sobre educación en la Universidad del Salvador

  • 23 de octubre, 2024
  • Buenos Aires (AICA)
En el marco de la celebración del 50° aniversario del documento "Historia y Cambio", el arzobispo porteño compartió cuatro notas de santidad que se pueden vivir en el ámbito académico.

En el marco de la celebración del 50° aniversario del documento "Historia y Cambio", que busca fortalecer la visión educativa, formativa y pastoral de la educación, el arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge García Cuerva disertó en la Universidad del Salvador sobre el Papa Francisco y la educación.

Ante directivos, docentes y alumnos, el prelado porteño compartió unas reflexiones sobre los espacios académicos, con foco en cuatro notas de santidad que se pueden vivir en el ámbito académico.

En primer lugar, señaló que "en el mundo de hoy se necesitan discípulos que sean verdaderamente alegres y se sostengan en el buen humor. Entonces creo que pensar que nuestra condición de educadores tiene que ver con la alegría no es un detalle menor, hoy es revolucionar y contracultural plantear el tema de la alegría".

"En ese contexto tenemos que sostenernos en la alegría, que no depende del cambio climático, que no depende de mi estado de ánimo, que no depende de la política económica del país. Una alegría profunda que es justamente y volvemos a los cimientos, de los testigos", enfatizó.

"La segunda nota que plantea Francisco para los testigos del mundo de hoy y que nos sirve para el ámbito educativo es la paciencia. Es real que tenemos que aprender a sostenernos en la paciencia y en la esperanza. El que puede ser protagonista de su propia vida es aquel que ha podido ser protagonista de su educación. Aquel que puede mirarte a los ojos y descubrir el potencial que tiene dentro, sobre esto voy a volver. Para eso necesito un cuerpo docente que crea en la persona", añadió.

Monseñor García Cuerva destacó la tercera característica que da el pontífice en su exhortación apostólica es la audacia y la creatividad de los testigos: "Francisco en la carta de los principios en 1974 planteaba la lucha contra el ateísmo. Y creo que hoy en la relectura que podemos hacer tiene que ver con poder recuperar la dimensión trascendente del hombre. La misión trascendente del hombre que de algún modo y pienso después de la pandemia, nos hizo tomar consciencia que aquellas cosas más importantes en nuestra vida no tienen precio y que no se compran en ningún supermercado".

Testigos santos en comunidad
Para concluir su alocución, monseñor García Cuerva se refirió a un pasaje donde el Papa plantea, en algún texto que dirige a docentes, "que hay que practicar la gramática del diálogo que forma encuentro porque -y citó Laudato si' en su número 47- 'la verdadera sabiduría es producto de la reflexión del diálogo y del encuentro generoso entre las personas'".

"Quizá más actual que nunca, la necesidad de practicar la gramática del diálogo y poder generar espacios de reflexión, de diálogo y de encuentro y creo que en ese sentido, las universidades y cualquier espacio educativo puede ser un hermoso laboratorio de diálogo y de reflexión", sugirió.

Al concluir su disertación, el arzobispo respondió preguntas de periodistas y docentes que se hicieron presentes, y luego agradeció por el momento compartido.+