Francisco invitó a los cirujanos a 'ser custodios de la vida de los que sufren'

  • 16 de octubre, 2024
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Al expresar su estima por los cirujanos italianos, el Papa Francisco les recordó que deben proteger la vida de quienes sufren y que la ciencia está al servicio de la humanidad y no al revés.

"Cuando tengan en sus manos un cuerpo humano, creado a imagen de Dios, actúen como 'artesanos de la salud', tratando a los demás con el mismo cuidado con el que les gustaría ser tratados", fue la sugerencia que el Papa Francisco hizo a los miembros de la Sociedad Italiana de Cirugía, a los que recibió en el Vaticano, con ocasión del 126° Congreso Nacional de la Sociedad Italiana de Cirugía.

El congreso se celebra en Roma bajo el tema "El futuro del cirujano - El cirujano del futuro".

El Santo Padre comenzó su discurso elogiando el trabajo de los cirujanos, en cuanto a salvar y cuidar vidas, y les agradeció los sacrificios que hacen para realizar esa importante labor.

En ese contexto, los instó a actuar siempre con humanidad y profesionalismo, y dentro de una cultura de la salud, que sirva a cada persona en su totalidad.


No sólo órganos o tejidos
El Papa les pidió que recordaran que, ante ellos, "hay siempre una persona viva", no "solamente sus órganos o tejidos", y advirtió que los médicos a veces olvidan que, en el centro, está la persona enferma o herida.

A veces, lamentó, la medicina moderna reduce el cuerpo a "un mero objeto de investigación científica y manipulación técnica", a "expensas del paciente, que pasa a un segundo plano".

La ciencia es para la humanidad
"¡Pero la ciencia es para la humanidad, no la humanidad para la ciencia!", afirmó el Papa, pidiendo una "ciencia humana".

En una época en la que la cirugía depende de muchas tecnologías nuevas, incluida la inteligencia artificial, el Papa reconoció lo importante que es "no olvidar nunca que nada puede sustituir la "mano" del cirujano".

El Santo Padre animó a los médicos a promover los valores humanos, especialmente entre los futuros cirujanos. "Su trabajo y su misión -observó- serán siempre muy importantes: los invito, por tanto, a ser custodios de la vida de los que sufren".

Imitar al buen samaritano
Dirigiéndose a ellos como "estimados cirujanos", el Papa los invitó a imitar al Buen Samaritano y la cercanía y el cuidado del Señor hacia los necesitados. "Así -observó el pontífice-, todo buen médico se hace prójimo del propio paciente".

Antes de impartirles a los presentes la bendición apostólica, el Santo Padre agradeció a los cirujanos por todo lo que hacen para ayudar a la humanidad que sufre, y pidió que María, Salud de los Enfermos, acompañe su servicio y los conforte en sus trabajos e investigaciones.+