Haití: 'Maltratar a los extranjeros es un acto abominable', afirman los obispos

  • 15 de octubre, 2024
  • Puerto Príncipe (Haití) (AICA)
La Conferencia Episcopal local se manifestó contra las deportaciones masivas desde la vecina República Dominicana, denunciando actos de violencia e injusticia contra ciudadanos haitianos.

"La vida es sagrada e inviolable, y maltratar a los extranjeros es un acto abominable", afirmó la Conferencia Episcopal de Haití (CEH), haciéndose eco del pronunciamiento de la Conferencia Episcopal Dominicana, tomando posición sobre la crisis migratoria que se ha producido entre ambos países caribeños. 

Los obispos denunciaron así los actos de violencia e injusticia perpetrados contra ciudadanos haitianos, en particular durante las deportaciones masivas organizadas por las autoridades dominicanas. 

"Aprovechamos esta oportunidad para expresar nuestra solidaridad con todos nuestros compatriotas, que son víctimas directas", escriben los obispos.

"La información que hemos recibido -continúan- indica que las autoridades dominicanas quieren reforzar la seguridad y la protección de sus fronteras y de sus ciudadanos. Si bien es responsabilidad de las autoridades de cada nación fortalecer, cuando sea necesario, los sistemas económicos y de seguridad de sus países, los principios de la Declaración Universal de Derechos Humanos no autorizan a ningún Estado del mundo a maltratar a los extranjeros". 

La vida de todo ser humano "es sagrada e inviolable. Y las cuestiones fronterizas se resuelven mediante cumbres, reuniones y diálogo."

En nombre de los valores humanos y de la amistad que une a los dos pueblos (que comparten una misma isla en el Caribe), "nosotros, los obispos católicos de Haití, pedimos a las autoridades de la República Dominicana que respeten la dignidad y el carácter sagrado de la vida de los haitianos y pongan fin a este tipo de actos odiosos y discriminatorios. Maltratar a los extranjeros es un acto abominable. 'Los extranjeros deben ser recibidos con bondad', como leemos en el libro del Levítico".

Los obispos haitianos concluyen: "Reconociendo los esfuerzos de las autoridades de nuestro país, las instamos también a crear condiciones de vida saludables a través de un gobierno responsable y comprometido, para que nuestros compatriotas puedan sentirse en paz, en armonía, en seguridad y en la esperanza de una vida mejor. Nuestros compatriotas necesitan ver condiciones socioeconómicas humanizadoras en Haití, nuestro hermoso país, que los convenzan de no emigrar, en busca de condiciones más humanas, hacia el extranjero".+