Mons. García Cuerva: 'El mejor regalo a la Virgen es estar unidos'

  • 10 de octubre, 2024
  • Buenos Aires (AICA)
El arzobispo porteño entronizó una imagen de Nuestra Señora del Pilar en la plaza Mujica Láinez e instó a la comunidad a "reconocer que somos hermanos a pesar de nuestras diferencias".

En el marco de la novena preparatoria para las fiestas patronales de la basílica Nuestra Señora del Pilar, el arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge García Cuerva, presidió EL 9 de octubre la oración de entronización y la bendición de una imagen de la Virgen en la plaza Mujica Láinez, del barrio porteño de Recoleta.

Participaron de la celebración el subsecretario de Culto de la Nación, Agustín Caulo; la directora general de Cultos de la Ciudad de Buenos Aires, Pilar Bosca; el presidente de la Comuna 2, Agustín Fox; la presidente de la Orden de Malta en la Argentina, María Podestá Herrera; alumnos, docentes y directivos del colegio parroquial Nuestra Señora de Pilar, feligreses de la basílica y vecinos del barrio.

La banda de la Policía Federal animó la celebración y entonó las estrofas del Himno Nacional. El arzobispo porteño presidió la misa en la plaza, que fue concelebrada por una docena de sacerdotes del decanato, entre ellos el párroco de Nuestra Señora del Pilar, presbítero Gastón Lorenzo.


En su homilía, monseñor García Cuerva hizo un llamado a la unidad: "El mejor regalo que le podemos hacer a la Virgen hoy es estar unidos como hermanos. Si hay alguien que nos convoca a la unidad, si hay alguien que nos une, es la Madre".

Además, planteó que "la unidad no es pensar todos igual, no es ser todos lo mismo, es respetarnos, es querernos, es saber que somos todos hermanos".

"Decir Madre del Pilar es reconocer que somos hermanos en un barrio, en una comunidad parroquial que se encuentra hoy aquí en esta plaza", sostuvo y añadió: "Las plazas del barrio son los lugares en los que en general nos encontramos con los vecinos, con los que queremos y con los que más o menos, pero son lugares de encuentro. Hoy María del Pilar nos reúne en esta plaza, lugar de encuentro, lugar de reunión, lugar de familia".

"Festejo enormemente que en un lugar público se dé espacio nuevamente a lo religioso", destacó y puntualizó: "Eso no significa que seamos todos católicos, significa que nos respetamos y que podemos, en nombre de la diversidad, ser distintos".

En ese sentido, señaló: "Esto es lo que más le gusta a la Virgen, reunirnos. Por eso estoy seguro de que hoy la Virgen está contenta. Le estamos regalando el mejor regalo: estar unidos a pesar de nuestras diferencias. Estamos en una plaza, lugar de encuentro de vecinos. Hermosísimo eso también".

A su vez, insistió en la importancia de construir entre todos la unidad, y llamó a preguntarse "¿Qué país le estamos dejando a los chicos?" "Por eso hoy tenemos una buena noticia, encontramos algo que nos une: una Mamá. Somos todos hijos de Dios", animó.


"Por eso, le damos gracias a la Virgen porque nos reúne, le regalamos este signo de unidad de estar todos juntos. Aquí está la Virgen, aquí va a estar siempre. Que te recuerde que somos todos hermanos", instó y concluyó: "Mamá está acá, mamá te cuida, mamá nos une, mamá nos reúne en esta plaza, mamá nos hace mejores vecinos, nos hace más hermanos. En definitiva, mamá nos hace familia".

La directora del colegio parroquial, María José Butrón, dirigió unas palabras a los presentes, en las que destacó que "la Virgen está presente en nuestra vida diaria".

De ahí que celebró que ahora también la Virgen esté en esa plaza, donde transcurre gran parte de la vida barrial: cumpleaños, los novios que se casan en el registro civil se sacan fotos, etc. y que ahora contará con la presencia maternal de la Virgen.

El arzobispo de Buenos Aires también pronunció unas palabras al concluir la Eucaristía y, haciendo referencia a "la soledad que viven muchos en la Ciudad de Buenos Aires", animó a "sentirnos familia, venir a esta plaza y compartir con la Virgen nuestras angustias".

"Pedimos la unidad porque la necesitamos, pedimos la unidad porque somos hermanos, pero también pedimos por todos nuestros hermanos que recorriendo esta ciudad se sienten muy solos, para que aquí, junto con María, se sientan familia", alentó.+