El Vaticano: nuevo envío de alimentos y medicinas a Ucrania
- 14 de agosto, 2024
- Ciudad del Vaticano (AICA)
El envío y la distribución fueron supervisados por el limosnero papal, Card. Konrad Krajewski.
Los esfuerzos caritativos del Papa hacia Ucrania continúan, aún durante el cálido verano europeo. Como en meses anteriores, varios camiones salieron desde la basílica ucraniana de Santa Sofía, en Roma, con suministros esenciales, como alimentos, ropa y medicamentos, para la población necesitada de ese país de Europa del Este. El envío incluye, por ejemplo, cajas de atún, un alimento que puede ser conservado por mucho tiempo.
La distribución se confió al Dicasterio de la Caridad y se compartió con el exarcado greco-católico de Járkov, cuyo obispo, monseñor Vasyl Tuchapets, manifestó que "muchas personas evacuadas de las zonas fronterizas llaman a nuestras puertas pidiendo ayuda. Se escaparon sin nada, sólo con documentos. Por eso, esta ayuda humanitaria es realmente importante, y agradezco nuevamente a todos los bienhechores que aceptaron nuestro llamamiento y decidieron ayudar al pueblo de Járkov, que sufre por la guerra. Rezamos por todos los bienhechores", expresó el prelado ucraniano.
Por su parte, el prefecto del Dicasterio, cardenal Konrad Krajewski, agradeció la generosidad de los romanos y supervisó el envío y la distribución de la ayuda.
La caridad del Papa llega al corazón del conflicto en Ucrania, en Járkov, la región más afectada por los bombardeos rusos. Después de aproximadamente cuatro días desde su salida de Roma, los camiones llegaron a Ucrania el jueves 8 de agosto.
Apoyo de la Guardia Suiza
Un grupo de guardias suizos colaboró con este nuevo envío de ayuda del Papa, quienn, desde el inicio de la guerra, remite continuamente donaciones a la población afectada por el conflicto. El propio Krajewski entregó personalmente el cargamento en una docena de viajes a Ucrania.
En Roma, fueron los jóvenes soldados del Vaticano quienes, en la basílica Santa Sofía, cargaron los camiones manualmente durante varias horas, hasta llenarlos hasta el techo de cajas.+