Corea del Sur: Seúl inicia su camino hacia la JMJ 2027

  • 30 de julio, 2024
  • Seúl (Corea del Sur) (AICA)
La comunidad local preparó el escenario para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) 2027, con una gran celebración de lanzamiento en la catedral de Myeongdong, en la capital surcoreana.

La arquidiócesis de Seúl (capital de Corea del Sur) lanzó oficialmente el camino local hacia la 42ª Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que se realizará en el país en 2027, con lo que será la segunda en Asia, después de la de Manila 1995.

El acto de lanzamiento se produjo un año después de la misa de clausura de la JMJ en Lisboa, donde, el 6 de agosto de 2023, el Papa Francisco anunció desde el Parque del Tajo, ante más de un millón y medio de jóvenes, que Corea del Sur acogería el próximo encuentro de jóvenes católicos, según el modelo concebido en 1986 por el Papa Juan Pablo II

El corazón de la jornada fue la celebración en la catedral de Myeongdong, organizada conjuntamente por el Dicasterio vaticano para los Laicos, la Familia y la Vida (DLFL), el Comité Organizador Regional de la JMJ de Seúl y la nunciatura apostólica en Corea.

Con el lema "La esperanza comienza en Seúl", el acto fue un símbolo de unidad y optimismo para el futuro, sentando las bases para el trabajo de planificación y preparación que se desarrollará durante los próximos tres años. A la procesión inicial con las banderas que representaban a 194 países, siguió una ceremonia simbólica de "rompecabezas" y el discurso del arzobispo, monseñor Peter Chung Soon-taek, quien, flanqueado por representantes de la juventud, hizo una declaración oficial de lanzamiento de la iniciativa. También estuvieron presentes el viceministro de Cultura, Deporte y Turismo, Yong Ho-sung, y el alcalde de Seúl, Oh Se-hoon

"Cultivar juntos la esperanza"
La ceremonia concluyó con una misa celebrada por el arzobispo Chung, acompañado por el cardenal Andrew Soo-jung Yeom y los obispos Job Yo-bi KooPaul Kyung-sang LeeTitus Sang-Bum Seo

En su homilía, el arzobispo Chung habló de la misión de la Iglesia de proporcionar una plataforma para los jóvenes, instándolos a unirse en la esperanza y la oración mientras se preparan para ese importante evento.

"Tengo la profunda aspiración de que la Iglesia ofrezca una plataforma para los jóvenes de nuestro tiempo, un escenario donde puedan surgir como protagonistas de sus propias historias. Estoy seguro de que este escenario servirá como una oportunidad y un espacio de esperanza para todos ustedes", afirmó el prelado. 

"La Iglesia quiere preparar un escenario para los jóvenes, un lugar para los jóvenes, donde se conviertan en los protagonistas de este tiempo", dijo el arzobispo Chung. "Quiero soñar con un futuro de esperanza con ustedes, a través de la JMJ de Seúl". Hablando de Corea del Sur, añadió: "En sólo un siglo, nuestro país se ha convertido en una democracia. Hemos hecho notables progresos en la cultura, pero si nos fijamos en la vida de los jóvenes, la realidad actual no es nada fácil". 

De esta toma de conciencia en el acto de ayer, surgió la firme esperanza de que la etapa preparatoria fuera una oportunidad para que los jóvenes participantes dieran una orientación a la sociedad actual, enviando un mensaje a todos sus coetáneos. 

"El milagro del cambio de una persona y de nuestra comunidad queremos experimentarlo a través de nuestra preparación y de la JMJ de Seúl. Les pido, jóvenes, que participen activamente como hacedores de milagros", añadió el arzobispo.

"Juntos, deseo cultivar esta esperanza compartida a través de la JMJ. Creo que la JMJ representa una oportunidad inestimable para que los jóvenes de todo el mundo, incluidos los jóvenes coreanos, reflexionen y participen en estas difíciles tareas. Es imperativo que unamos nuestros corazones, oremos juntos y discernamos la guía del Espíritu Santo, mientras nos preparamos con seriedad para este viaje", añadió.

La misa incluyó una oración universal en varios idiomas, reflejando el espíritu global de la JMJ. El nuncio apostólico en Corea, monseñor Giovanni Gaspari, y el Dr. Gleison De Paula Souza, secretario del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, transmitieron mensajes de aliento, y el Dr. Souza destacó, asimismo, la elección de Seúl como ciudad anfitriona, reconociendo su rico patrimonio cultural y su espíritu de innovación.

Más de 20 mil puestos de trabajo
Otro momento destacado de la celebración de ayer -a la que asistieron más de 900 jóvenes de diferentes procedencias, entre ellos discapacitados, desertores de Corea del Norte y militares del Ejército, la Armada y las Fuerzas Aéreas- fue la presentación del impacto económico del gran acontecimiento, que atraerá a cerca de un millón de jóvenes de todo el mundo.

Según el estudio 2027 World Youth Day Economic Value Evaluation and Business Development Study, realizado por encargo del Comité Organizador por la KDI School of Public Policy and Management de Sejong, el impacto económico de la próxima Jornada Mundial de la Juventud de Seúl se estima en más de 11,3 billones de wones (más de 7.500 millones de euros), 1,59 billones de wones en efectos de valor agregado y la creación de 24.725 puestos de trabajo, lo que demuestra los beneficios potenciales para Seúl y la región en general.

En espera del lema
En la marcha hacia la JMJ 2027, la próxima cita está prevista para septiembre de este año, cuando el Papa Francisco anuncie el pasaje de las Escrituras que inspirará el tema y el logotipo oficial. A ello seguirá, en noviembre, la entrega de los símbolos de la JMJ, la cruz de madera y la antorcha, a los representantes de Seúl.+