Economía de Francisco inicia un curso para jóvenes latinoamericanos en México

  • 19 de junio, 2024
  • Ciudad de México (AICA)
Inauguran en México el Curso de Verano de la Escuela de Economía de Francisco, que impulsa la construcción de un modelo inclusivo y equitativo.

Analizar, encontrar e impulsar nuevas alternativas a los modelos económicos e implementarlos a nivel mundial, son los objetivos del primer Curso de Verano de la Escuela Internacional de Economía de Francisco, inaugurado en México y a dictarse del 16 al 22 de junio, en el que participan jóvenes economista de diversos países de Latinoamérica.

De esta manera, y luego de que se realizaran dos ediciones en Italia, México se convierte en la sede del primer Curso de Verano en español de esa Escuela Internacional con perspectiva latinoamericana, con el que se pretende hacer eco del llamado que hizo el Papa Francisco a los jóvenes en todo el mundo, para encontrar nuevas alternativas a los modelos económicos existentes.

La Escuela de Economía de Francisco busca fomentar así la solución de los desafíos económicos

Cabe destacar que el Curso de Verano que se impartirá en México es un proyecto colaborativo, impulsado y organizado por el Instituto Mexicano de Doctrina Social Cristiana (Imdosoc), el Centro Internacional de Investigación de Economía Social y Solidaria de la Universidad Iberoamericana (Ciiess) y "The Economy of Francesco Internacional", quienes organizaron en Italia las dos ediciones anteriores, realizadas en inglés.

De esta manera, el movimiento internacional respaldó a los organizadores de México, para que el encuentro se realizara en español y con una perspectiva latinoamericana, ya que el Curso de Verano de la Escuela de Economía de Francisco se llevará a cabo en las instalaciones del Imdosoc en la Ciudad de México, del 16 al 22 de junio.

"Este movimiento es fundamental para contribuir significativamente al debate público y fomentar en más jóvenes la búsqueda de soluciones para los desafíos actuales. La Escuela Internacional de Economía de Francisco no solo busca generar conocimiento, sino también inspirar un cambio de mentalidad y promover la participación activa de las juventudes en la construcción de un modelo económico más inclusivo y equitativo", aseguró el Imdosoc.

Celam: buscar caminos nuevos y sanar heridas
Al bendecir de manera virtual las jornadas del Curso de Verano, monseñor Lizardo Estrada, secretario general del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam), indicó que este proyecto alienta el estudio de la Economía de Francisco, por lo que no es un programa económico del Papa, sino una invitación del Santo Padre a buscar caminos nuevos para sanar las heridas y dolores que la conformación actual de la sociedad provoca entre los más necesitados.

"El Papa Francisco nos pide que busquemos caminos inspirados en Francisco y Clara, mirando primero a los más pobres. Nos ofrece una tarea, no una receta: que potenciemos los rasgos positivos y seamos capaces de superar lo que atenta contra el reino, que derrótenos la cultura de la muerte, que vayamos más allá del Viernes Santo, para vivir la Pascua de Resurrección; no podía ser de otra manera", aseveró.

De la misma manera, subrayó monseñor Estrada a los 40 jóvenes que participarán en el Curso de Verano, se debe partir del hecho de que la iglesia -como decía Pablo VI - es experta en humanidad y, desde esa perspectiva, "se los convoca a ustedes a pensar nuevos caminos, a impulsar tantas iniciativas que surgen en nuestros pueblos".

"Hoy se inicia una reflexión intelectual sobre la invitación del Papa a tener por ejemplos a Francisco y Clara, para construir nuevos caminos económicos. Quiero pedirles que esa reflexión no se quede en lo intelectual, sino que invite a la acción; más aún, para que esa acción llegue a los ojos del buen Dios y se construya por todos, porque estamos llamados a caminar juntos", puntualizó el secretario general de la Celam.

Finalmente, al inaugurar los trabajos del Curso de Verano de la Escuela de Economía de Francisco, la directora del Imdosoc, Karen Castillo Mayagoitía, señaló su placer por saber que los participantes en este proyecto "lo hacen porque les mueve el deseo de compartir y la esperanza de construir, juntas y juntos, una casa y una realidad más habitables para cada persona".

"La espiritualidad franciscana, como espiritualidad de vida en abundancia, nos ofrece claves concretas para repensar nuestros modelos y relaciones económicas. Que los diferentes momentos de esta semana nos permitan profundizar y tener la certeza de que, cuando el corazón se conecta con el deseo de un buen vivir, que se comprende desde la llamada a vivir en abundancia, es fácil que el latir de la espiritualidad franciscana nos haga palpitar con nuevas alternativas", concluyó.+