Fuertes gestos por la unidad de los cristianos en el Luna Park

  • 15 de octubre, 2012
  • Buenos Aires (AICA)
Unos 6.000 católicos y evangélicos colmaron este sábado de oraciones, alabanzas y música el estadio Luna Park, en el marco de un encuentro ecuménico para exteriorizar la unidad de los cristianos, que llevó por lema "El evangelio poder de Dios" y contó con las meditaciones del predicador de la Casa Pontificia, padre Raniero Cantalamessa. También predicaron el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Jorge Bergoglio, y el pastor Carlos Mraida, de la Iglesia del Centro. "Acá se vivió un clima de una sola Iglesia en Cristo", destacaron desde la Comunión Renovada de Evangélicos y Católicos en el Espíritu Santo (CRECES), a cargo de la organización. La manifestación de fe tuvo un gesto solidario fuerte al destinar la recaudación de la colecta, unos 73.000 pesos, a los "hermanos" del hospital psiquiátrico porteño José Tiburcio Borda. Informes: www.infocreces.com.ar .
Unos 6.000 católicos y evangélicos colmaron este sábado de oraciones, alabanzas y música el estadio Luna Park, en el marco de un encuentro ecuménico para exteriorizar la unidad de los cristianos, que llevó por lema "El evangelio poder de Dios" y contó con las meditaciones del predicador de la Casa Pontificia, padre Raniero Cantalamessa. "Acá se vivió un clima de una sola Iglesia en Cristo", destacaron desde la Comunión Renovada de Evangélicos y Católicos en el Espíritu Santo (CRECES), a cargo de la organización. La manifestación de fe tuvo un gesto solidario fuerte al destinar la recaudación de la colecta, unos 73.000 pesos, a los "hermanos" del hospital psiquiátrico porteño José Tiburcio Borda. Experiencia pionera El padre Cantalamessa reveló en rueda de prensa que la última vez que predicó ante el papa Benedicto XVI le comentó sobre "esta novedad argentina que significa CRECES", a la que definió como "una experiencia pionera en el mundo de la renovación y unión entre evangélicos y católicos". El religioso predicó dos veces ante una tribuna con muchos jóvenes, que respondían a sus reflexiones con aplausos, gritos y oraciones. Mientras pastores, obispos y sacerdotes lo seguían desde las primeras filas del estadio. También funcionarios, entre ellos el director general de Cultos porteño, Alfredo Abriani, quien subió al escenario para leer el decreto que declara de interés para la Ciudad este encuentro ecuménico. El padre Cantalamessa aseguró que "si todas las biblias desaparecieran de la faz de la tierra y quedara solo una línea para leer, sería: ?Dios es amor?. Es la palabra resumidora, toda la Biblia está ahí". Tras explicar que "la verdadera novedad del cristianismo es que se tiene que vivir bajo la ley del Espíritu Santo, que no es una ley obligatoria sino que se cumple por atracción", sostuvo que "la vida cristiana no se vive por miedo a no cumplir la ley sino por amor, ésta es la novedad del cristianismo". Uno de los momentos culminantes fue cuando Cantalamessa hizo rezar al estadio Luna Park el Magníficat, un canto de alabanza a la Virgen María, el único que comparten católicos y evangélicos a quien es considerada la madre de Jesús. "María es la primera pentecostal y carismática de la Iglesia", dijo. Sorpresa y ternura También predicó, y fue ovacionado por el estadio, el arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Jorge Mario Bergoglio, quien recordó que "Jesús estuvo fundamentalmente en la calle, caminaba en medio de la gente y pasaba haciendo el bien". "Todavía hoy sigue pasando, y no vaya a ser que no lo reconozca. Hoy le quiero pedir al Señor, tener ese santo miedo de no reconocerlo entre nosotros", dijo. El purpurado porteño lamentó que la Iglesia esté "floja en capacidad de sorpresa y ternura. Son dos atributos que estamos perdiendo y en algunos casos los perdimos del todo. Estamos atiborrados de huelgas, salideras bancarias y otras malas noticias. Nos vamos empachando de malas noticias y nos olvidamos de las buenas". El cardenal Bergoglio pidió perdón porque "la Iglesia ha perdido la ternura" y en medio de una ovación de los presentes, rezó: "Que no nos acostumbremos a ver en la calle a niños desnutridos, gente abandonada, gente a la que le falta comida y abrigo. Señor que cada vez que veamos una llaga nos sorprendamos y nos acerquemos con ternura". A su turno, el pastor Carlos Mraida, de la Iglesia del Centro y uno de los presidentes del Consejo de Pastores de Buenos Aires, abogó porque los cristianos "seamos militantes por la vida, por la justicia y la equidad" al afirmar que "los cristianos tenemos que hablar por los que no tienen voz". "El Evangelio no se avergüenza ante un sistema que nos dice que la fe ya fue", enfatizó en medio de aplausos. CRECES es una iniciativa de laicos y pastores que comenzó en 2003 y reúne a cristianos católicos y evangélicos. Iniciativa de oración y escucha de la palabra de Dios, buscando juntos la unidad del Cuerpo de Cristo. Informes: www.infocreces.com.ar .+