Mons. Colombo: 'La vida de fe y la piedad religiosa no están para el aislamiento'
- 12 de febrero, 2024
- Mendoza (AICA)
En la Jornada Mundial del Enfermo, el arzobispo de Mendoza resaltó el valor de los vínculos e hizo hincapié en cuánto agravan la situación del enfermo la soledad, la marginación, la falta de cuidado.
En el marco de la memoria litúrgica de Nuestra Señora de Lourdes, día en que la Iglesia celebra la Jornada Mundial del Enfermo, el arzobispo de Mendoza, monseñor Marcelo Colombo, presidió una misa en el santuario Nuestra Señora de la Carrodilla.
En su homilía, resaltó el valor de los vínculos, inclusive en los momentos de mayor dolor, e hizo hincapié en cuánto agrava a la situación del enfermo la soledad, la marginación, la falta de cuidado.
“De esto nos habla el Papa Francisco en la carta dirigida a los fieles con ocasión de la Jornada Mundial del Enfermo que hoy celebramos: ‘Cuidar al enfermo, cuidando las relaciones’”, destacando que Dios “nos creó para estar unos junto a otros”.
Haciendo referencia al Evangelio, invitó a preguntarse “¿Cuáles son nuestras lepras? ¿Qué cosas nos aíslan y alejan?”
“Dios nos invita, en cambio, a emprender siempre una y otra vez el camino del regreso a la vida comunitaria, al encuentro de los otros”, sostuvo, y consideró que “la vida de fe y la piedad religiosa no están para el aislamiento. Al contrario, ser religiosos nos hace ser profundamente atentos a lo social y comunitario”.
#Por eso -explica- este hombre rescatado de la lepra no sólo vuelve a la comunidad de fe que integra, sino que además se hace testigo de Jesús, se hace capaz de misionar, de alguna manera con la obra de Jesús en él".
En ese sentido, el arzobispo de Mendoza expresó su deseo de que “también nosotros dejemos nuestras soledades y aislamientos, que no dejemos de pensar en el otro como un hermano, que abandonemos cualquier forma de segregación, de temor respecto de los otros, de mirarlo como un potencial peligro o amenaza”.
El prelado señaló que, providencialmente, “estas lecturas nos llegan en la Jornada mundial del enfermo. Aquí en Mendoza, es una fiesta de gran relevancia que nos invita a ir al encuentro de nuestra Madre de Lourdes que nos espera en su casa del Santuario del Challao”.
Asimismo, recordó que “desde las 21 caminaremos hacia allí, y como el leproso, tendremos ocasión de orar y cantar, recordando la obra de Dios en nosotros. En su casa, la Virgen de Lourdes nos recuerda que somos hermanos cobijados por su amor de madre”.
También dio gracias por la canonización de Mama Antula, “una extraordinaria mujer que proclamó la obra del amor de Dios en su vida, en el siglo XVIII en la Argentina”.
“A través suyo, numerosos hombres y mujeres conocieron al Señor y fundaron su fe en una robusta experiencia de Dios en sus vidas. La Santa de los Ejercicios, como se la llamaba, descubrió en ese valioso instrumento de la espiritualidad cristiana, una fuente de riqueza para anclarse al Señor de su vida”, concluyó.+