La Merced en la basílica de la Virgen de Buenos Aires
- 28 de septiembre, 2012
-
Buenos Aires (AICA)
Con la participación de una multitudinaria concurrencia de fieles y en un marco de fervor, devoción y espíritu cívico se desarrollaron los actos del día de Nuestra Señora de la Merced en la basílica Nuestra Señora de Buenos Aires (avenida Gaona y Espinosa), de la Capital Federal, cuya parroquia es atendida por los religiosos mercedarios. En ocasión de los 200 años del triunfo en la Batalla de Tucumán, tras la que el general Belgrano declaró a la Virgen de la Merced Generala del Ejército argentino, se efectuó un acto en el camarín de la basílica que guarda la imagen original a la que Belgrano en aquella ocasión le entregó su bastón de mando reconociendo que la victoria le pertenecía a Ella. Debido a que este bastón se conserva en la iglesia de la Merced de la capital tucumana, se realizó un homenaje simbólico colocando en las manos de la imagen una réplica del bastón de Belgrano.
Con la participación de una multitudinaria concurrencia de fieles y en un marco de fervor, devoción y espíritu cívico se desarrollaron los actos del día de Nuestra Señora de la Merced, en la soberbia basílica de Nuestra Señora de Buenos Aires (avenida Gaona y Espinosa), de la Capital Federal, cuya parroquia es atendida por los religiosos mercedarios.
El extenso programa de actos se inició a la mañana del 24 de septiembre con el izamiento de la bandera nacional a cargo de laicos de la parroquia, y la colocación de una ofrenda floral ante el busto del General Belgrano, ubicado cerca del atrio, por la doctora Nilda Bertoli, también de la comunidad paroquial, acompañados por las interpretaciones musicales de la Banda del Regimiento 1 Patricios.
En ocasión de los 200 años del triunfo en la Batalla de Tucumán, tras la que el general Manuel Belgrano declaró a la Virgen de la Merced Generala del Ejército argentino, se efectuó un acto en el camarín de la basílica donde se venera la imagen original a la que Belgrano en aquella ocasión le entregó su bastón de mando reconociendo que la victoria le pertenecía a Ella. Debido a que este bastón se conserva en la iglesia de la Merced de la capital tucumana, se realizó un homenaje simbólico colocando en las manos de la imagen una réplica del bastón de Belgrano.
El acto fue presidido por el padre Carlos Gómez, O.de M., párroco de esta comunidad y superior provincial de la Orden de la Merced en la Argentina. Lo acompañaron el capellán mayor del Ejército, monseñor Mario Rodolfo Bonabotta, el Jefe del Regimiento 1 Patricios, representantes del Instituto Belgraniano y del "Uno Grande" (fundación de mantenimiento histórico de las tradiciones del Regimiento Patricios) y numerosos fieles.
Previamente a la colocación de la réplica del bastón belgraniano, el doctor Claudio Morales Gorleri se refirió al acontecimiento y a la histórica Imagen.
Por la tarde, a las 16, se inició el rezo del Rosario por la Patria y a las 18 salió la procesión con la imagen de la Virgen de la Merced, seguida por una abigarrada multitud de fieles y acompañada por la Banda Tacuarí del Regimiento Patricios. Detrás de la imagen grande se ubicaron las réplicas de la imagen de la Virgen de la Merced con las que las diversas instituciones parroquiales se encuentran misionando en los hogares de la parroquia y el barrio. A lo largo del recorrido se unieron los aplausos, oraciones y vítores a la Madre y reflexiones sobre el motivo de la fiesta.
Pasadas las 19 la imagen de la Virgen ingresó al templo en donde el padre Gómez presidió la concelebración eucarística. La iglesia, muy grande por cierto, estaba colmada de fieles. El padre Gómez pronunció la homilía que finalizó proponiendo que para el año venidero, en que se cumple el centenario de la llegada de la histórica imagen a esta basílica, se haga la procesión con esa Imagen. La sugerencia fue recibida con un cálido y sostenido aplauso.
Al término de la misa, el programa prosiguió con un concierto brindado por la Orquesta de Cámara de la Fuerza Aérea, que interpretó variados temas, reconocidos y entusiastamente aplaudidos por los asistentes.+