El Papa, a dos congregaciones: 'Sin la oración las cosas no funcionan'

Francisco recibió a los Misioneros del Sagrado Corazón de Jesús y a las Hermanitas de Jesús, reunidos con motivo de la celebración en Roma de sus respectivos capítulos generales.

“Conocer el corazón de Jesús a través del Evangelio”, aconsejó el Papa Francisco a los Misioneros del Sagrado Corazón de Jesús, a los que recibió en el Vaticano con motivo de su capítulo general. El pontífice recordó que, cuando el padre Jules Chevalier fundó esa congregación hace casi 170 años, quería verla como un grupo de misioneros comprometidos en difundir la noticia del amor de Dios, de tal manera que las personas pudieran responder también con amor.

En su mensaje a los religiosos, el Santo Padre retomó el pasaje de los discípulos en el camino de Emaú,s que fue la inspiración para el capítulo general. Al comentar ete pasaje, el Papa llamó la atención sobre tres actitudes que podemos aprender de él. 

Primero: conocer el Corazón de Jesús a través del Evangelio, es decir, meditando en él la vida de Nuestro Señor. Según señaló, este fue el camino trazado por el fundador de la congregación, el padre Chevalier, cuando decía que "el Evangelio es el libro del Sagrado Corazón, e invitaba a todos a contemplar el amor con el que el Salvador se deja tocar por toda clase de pobreza y se alegra de llevar la ternura y la compasión de su Corazón a los pequeños, los pobres, los que sufren, los pecadores y a los que sufren todas las miserias, es decir, a ‘la humanidad toda’". 

"Para que esta poderosa experiencia se convierta en luz para el camino, debe pasar también por el enriquecimiento del compartir. He aquí el segundo elemento: profundizar y comprender la Palabra en el compartir fraterno", dijo el Papa.

Luego, el Papa Francisco centró su atención en la importancia de profundizar el entendimiento a través del intercambio fraterno. Trazó paralelismos con los discípulos en el camino a Emaús, quienes, después de reconocer a Jesús, compartieron entre sí su asombro y sus experiencias. Este acto de compartir alegría y asombro al encontrar al Señor es una práctica que el Papa Francisco animó a adoptar a los Misioneros. "Antes de encontrarse con Él, los dos compañeros discutieron fracasos y desilusiones, y después se alegraron de haber visto al Resucitado".

También destacó el papel de compartir la vida del Padre Chevalier, mencionando cómo compartió su fervor y sus sueños con sus compañeros, a quienes se refirió como "caballeros del Sagrado Corazón". Compartir experiencias de encuentro con Cristo en la Palabra, los Sacramentos y la vida diaria es esencial para fomentar la unidad y el compromiso constructivo dentro de la congregación. "Y llegamos así al último aspecto: el anuncio gozoso en la misión. Los discípulos de Emaús parten sin demora, regresan a Jerusalén y cuentan lo sucedido".

El Papa Francisco enfatizó el significado de la proclamación gozosa en la misión. Elogió a los Misioneros por adoptar el lema "'del ego al eco', es decir, del yo al hogar común, a la familia, a la comunidad, a la Creación". Este cambio, explicó, abarca el compromiso de servir como hogar común a la familia, la comunidad y la Creación. "Frente a ello, no tengan miedo de dejarse llevar por la compasión del Corazón de Cristo; como decía su fundador, dejen que Él ame a través de ustedes y manifieste su misericordia a través de su bondad".

"¡Por favor, no tengan miedo de la ternura! El estilo de Dios se puede expresar en tres palabras: cercanía, compasión y ternura", concluyó.

A las Hermanitas de Jesús: sigan siendo especialistas en sensibilidad
Al recibir a las Hermanitas de Jesús, reunidas en Roma para su XII Capítulo General, donde eligieron a su nueva superiora y discernieron formas de responder a los últimos desafíos, dijo Francisco a las religiosas: "Hay momentos difíciles y problemas graves que hay que afrontar", a lo que añadió: “Pero también es cierto que ustedes son herramientas preciosas para que Dios siembre pequeñas perlas de sensibilidad en el mundo, y de sensibilidad evangélica”, añadió.

El pontífice se refirió al carisma de San Charles de Foucauld, en el cual se basan las hermanas. De ahí que reflexionó principalmente sobre las tres líneas rectoras de este modo de vida. 

La primera es la búsqueda de Dios, es decir, el encuentro con el Altísimo en la oración para estar cada vez más unidos a Jesús. De aquí se deriva el segundo motivo, que es el testimonio del Evangelio. Se trata de "clamar" con todo el ser que se pertenece a Cristo, señaló el Papa. Finalmente, la tercera línea directriz es el amor a la vida oculta, que se consigue acercándose a cada persona con la que uno se encuentra, afirmó el Santo Padre.+