La diócesis de La Rioja tiene un nuevo sacerdote
- 29 de agosto, 2023
- La Rioja (AICA)
El presbítero Alexis Rosales recibió su ordenación de manos del obispo local, Mons. Dante Braida, quien lo invitó a vivir el ministerio "con fidelidad y espíritu misionero".
El asesor de la Pastoral de Juventud de La Rioja, Alexis Rosales, recibió su ordenación sacerdotal en la misa que presidió el obispo local, monseñor Dante Braida, el viernes 25 de agosto en la catedral San Nicolas de Bari, la cual fue concelebrada por sacerdotes de esa diócesis. También asistieron seminaristas provenientes de la provincia de San Juan.
En la homilía, monseñor Braida se refirió a la figura de Jesús Buen Pastor y le señaló al ordenando: “Alexis, este Buen Pastor que te conoce así, te ha elegido, te ha llamado, ha puesto su mirada en vos, para que lo sigas como discípulo y sirvas a su pueblo, siendo una presencia viva de Él mismo”.
“No tendrás que apacentar tus ovejas, son las de Él, y tendrás que conocerlas, cuidarlas y ayudarlas a crecer como Él lo hace. Y tendrás que dar lo mejor de vos por ellas y, en cada acción pastoral, entregar tu vida por ellas”, continuó.
Seguidamente, señaló: “Querido Alexis, el horizonte de la misión es amplio y diverso. Tendrás que discernir en cada etapa del camino quiénes son aquellos a los que el Señor te envía, e ir con confianza y parresía. Muchos necesitan la Buena Nueva de Jesús y, muchas veces, no la escuchan por falta de misioneros o de espíritu misionero. Por eso, hoy es vital que cada comunidad, junto con sus pastores, concrete nuevos caminos misioneros para llegar a todos los rincones de cada parroquia, de cada ámbito social, de cada realidad existencial”.
El prelado recordó que el beato Enrique Angelelli sostenía que el sacerdocio “es apostólico; es misionero; es ejercicio de mediación; es esencialmente social; el sacerdocio es caridad; es amor; pobres de nosotros si lo convertimos para nuestra propia utilidad y provecho; el sacerdocio es donación total de la vida; es crucificante y, a la vez, signo de vida; de la Pascua; de la esperanza; deberá estar inmerso en la agitada y multiforme experiencia y vida de los hombres”.
“Encomendémosle, querido Alexis, al beato Angelelli tu sacerdocio, pidiéndole la gracia de vivirlo siempre con fidelidad y espíritu misionero”, agregó.
Monseñor Braida le manifestó también al neo presbítero que “seguir al Buen Pastor implica también estar dispuesto y buscar a la oveja perdida. Trabajar junto a las que están para que ninguna se pierda y para que a quien se ha descarriado se le puedan ofrecer nuevas oportunidades de cambio y conversión. Los últimos, los alejados, los pobres deben tener un lugar privilegiado en el corazón del pastor, porque ya lo tenían en el corazón del Buen Pastor”.
Y enfatizó: “Vivimos esta ordenación en tiempos donde estamos ahondando en la dimensión sinodal de la Iglesia. Se trata de que todos caminemos juntos y que cada bautizado encuentre su lugar en la Iglesia y, en comunión con ella, sea corresponsable de la misión evangelizadora”.
Finalmente, el sacerdote recién ordenado dijo: “Sueño con una Iglesia de puertas abiertas, que se anime a trabajar con los jóvenes, con las nuevas generaciones; una Iglesia que escucha al Espíritu Santo, una Iglesia riojana que se anime a renovarse a través de la voz de los jóvenes”.
» Texto completo de la homilía
Primera misa como sacerdote
Por su parte, el sábado 26, el presbítero Rosales presidió su primera misa en la capilla Santa Rosa de Lima, de la capital riojana, comunidad en la que transitó su diaconado.
Participaron de la Eucaristía sus compañeros del seminario de San Juan, familiares y otros seminaristas de La Rioja.
El capellán, presbítero Mauricio Giménez, pidió que Dios colmara de gracia al padre Rosales, y le deseó “vivir siempre como testigo de la luz y no como relator de un testimonio de otros sobre la luz”, al tiempo que pidió que el “centro de su corazón y su mente sea Jesús y que no dude en volver una y otra vez a la fuente”.+