Mons. Lozano: "Una nueva llamada a la conversión"

  • 19 de febrero, 2023
  • San Juan (AICA)
El arzobispo de San Juan de Cuyo y secretario general del CELAM dedicó su columna para este domingo 19 de febrero, sobre todo, a la Cuaresma y a su espíritu penitencial y solidario.

Monseñor Jorge Eduardo Lozano, arzobispo de San Juan de Cuyo y secretario general del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), se refirió en su columna para este domingo 19 de febrero, 7mo. del tiempo ordinario, a la Cuaresma y a las prácticas penitenciales y solidarias características de este tiempo litúrgico.

Luego de repasar el “origen pagano” del Carnaval y de precisar que “se cuentan 40 días para atrás desde el Domingo de Ramos para establecer la fecha” del comienzo de la Cuaresma, el arquidiocesano señaló: “Este miércoles comenzamos el tiempo de preparación hacia la Pascua. En la misa de ese día se impone sobre la cabeza la ceniza que se obtiene al quemar las ramas de olivo del Domingo de Ramos del año pasado. Es un signo y gesto de humildad y llamado a la conversión. De esta manera recordamos la fragilidad de la vida humana, lo fugaz y lo transitorio de este mundo”.

Y agregó: “Serán 40 días para disponer el corazón, revisar la vida y sobre todo crecer en la confianza en el amor de Dios por cada uno de nosotros”.

Al mismo tiempo, recordó: “El Miércoles de Cenizas —junto con el Viernes Santo— es una jornada de ayuno, si bien toda la Cuaresma tiene un tono penitencial de moderación en el estilo de vida”.

Y, al respecto, expresó: “No se trata, como solemos decir, ‘yo le ofrezco un sacrificio al Señor’. Si obro así, la privación me sirve solamente a mí; en cambio, si comparto, le sirve también a otros y a Dios le gusta más”. Y ejemplificó: “Si dejo de comer chocolates por estos 40 días, puede hacerme bien a la salud o moderar mis deseos, pero si además el dinero que hubiera gastado lo doy para ayudar a los pobres, ahí vamos en el camino de la verdadera piedad cristiana”.

Y sugirió: “El ayuno dura solamente un día, sin embargo, la necesidad de solidaridad es permanente. Por eso, te propongo que dispongas en tu casa de una caja pequeña o un sobre, donde vayas colocando el dinero que lográs ahorrar con tus privaciones para, al final de la Cuaresma, acercarlo a quienes se organizan en emprendimientos solidarios”.

Por otro lado, el prelado aludió a la situación de la Iglesia en Nicaragua, concretamente a “la insólita expulsión de sacerdotes, diáconos, catequistas, seminaristas y religiosos, entre ellos, las Hermanas de la Caridad fundadas por la Madre Teresa de Calcuta”. Y también mencionó “el veloz y fraudulento enjuiciamiento y condena a 26 años de prisión de monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa”.

En ese sentido, continuó: “Ya se habían clausurado emisoras católicas confiscando sus equipos técnicos”. Y concluyó: “Es muy grave que se amordace la predicación y se consolide la persecución como método de disciplinamiento. Todos tenemos derecho a vivir la fe. Acompañemos con nuestra oración y solidaridad a quienes sufren a causa de la fe”.+