Francisco: 'Guadalupe' habla de encuentro y comunión para el pueblo

  • 13 de febrero, 2023
  • Toledo (España) (AICA)
El Santo Padre envió un mensaje al arzobispo de Toledo, con motivo del hermanamiento de los santuarios de Nuestra Señora de Guadalupe de España y México.

Este lunes, 13 de febrero, en el marco de la solemne celebración eucarística en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe, Patrona de Extremadura y Reina de la Hispanidad, tuvo lugar el el acto de hermanamiento entre la Basílica de Santa María de Guadalupe de México y la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe de España.

A través de este hermanamiento, las dos basílicas se comprometen a celebrar con solemnidad en la Basílica del Tepeyac, la fiesta de la Virgen de Guadalupe de España, en el día el que el calendario litúrgico la conmemora: el 6 de septiembre de cada año.

Al mismo tiempo, se comprometen a celebrar con solemnidad en la Basílica de Nuestra Señora de las Villuercas, la fiesta de la Virgen de Guadalupe de México, el 12 de diciembre de cada año. Asimismo, cada basílica entronizará la imagen de una y otra advocación en los santuarios homónimos.

Es decir, que en la basílica mexicana esté presente la imagen de la Virgen de Guadalupe de España, y en el Santuario de la Puebla de Guadalupe reciba culto una reproducción de la tilma de San Juan Diego, en la que milagrosamente quedó plasmada la imagen de la Señora del Tepeyac.

También se rezará en la basílica española de la Virgen de Guadalupe por el pueblo hermano de México y elevar también plegarias en la basílica de México por el pueblo español.

Por último, ambas basílicas se comprometen en la divulgación del conocimiento de ambas apariciones de la Santísima Virgen, unidas bajo una común advocación, para estrechar los vínculos entre los fieles devotos de Guadalupe de España y de Guadalupe de México

Todos estos compromisos que hoy aceptan libre y gozosamente tienen como fin “promover y divulgar el amor a la Beatísima siempre Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra, invocada en México y en España con este nombre singular: Guadalupe. También es su ardiente deseo que este hermanamiento fortalezca los lazos fraternos que siempre han unido a nuestros pueblos y redunde todo ello en la mayor gloria de Dios y la salvación de las almas”.

María es vínculo de comunión
Con motivo del hermanamiento de los dos santuarios marianos dedicados a la Virgen María de Guadalupe, el papa Francisco  envió un mensaje al arzobispo de Toledo (España).

En su mensaje, el pontífice escribió: “María, nuestra Madre, es siempre para su pueblo vínculo de comunión. Tanto la Escritura como la tradición apostólica nos la muestran convocando a los apóstoles y a la comunidad en torno a ella, en un clima de oración” y pidió al arzobispo de Toledo, monseñor Francisco Cerro, que haga extensivo el saludo al arzobispo de México, cardenal Carlos Aguiar Retes, y a través a de ellos a todos los sacerdotes y fieles devotos en México y España.  

'Guadalupe' nos habla de encuentro
“Hoy los convoca el dulce nombre de María, más precisamente una advocación milenaria que, ya en su raíz etimológica nos habla de mestizaje, de encuentro con Dios y con los hombres. Mestizaje, porque los estudiosos no se logran poner de acuerdo si debemos leer el título “Guadalupe” en árabe, en latín o en náhuatl”, dice el Papa.

Y menciona que “es curioso que lo que podría plantearse como un conflicto pueda en realidad leerse como un guiño del Espíritu Santo, que hace escuchar su mensaje de amor a cada uno en su lengua”.

“Así, en árabe –explica el Papa- la palabra podría sonar a ‘río oculto’, como lo estaba esa fuente de agua viva que Jesús promete a la samaritana, esa fuerza de la gracia que, incluso en tiempos de rechazo e incomprensión, mantiene viva a la Iglesia (cf. Jn 4,10). Como pastores, esta alusión debe ser para nosotros un acicate, buscar siempre en el otro ese río oculto de gracia, ese Amor de Dios que lo hace un tesoro inestimable”.

Por otra parte, en cuanto al significado de “Guadalupe” en latín, la palabra –añadió Francisco- nos hablaría en este caso de un “río de lobos”.

“En ese sentido, se trataría de un remanso de paz para aquellos que están atribulados por sus propios pecados, por la violencia, por tantas guerras internas y externas que hacen del hombre un lobo para el hombre. Es el mismo río oculto de la gracia que, en el diálogo con Jesús, nos muestra nuestra realidad, abriéndonos a la esperanza”, comentó el Papa.

Y finalmente, tomando "la raíz mexicana, nuestra Señora de Guadalupe se proclama como la que vence a la serpiente, con una evocación al protoevangelio del Génesis. La Inmaculada es así la verdadera madre de todos los que viven; de los que han sido convocados hoy en ese santuario, junto a sus pastores, para proclamar su fe en el Hijo de Dios, en Aquél que, haciendo nuevas todas las cosas, ha reconciliado consigo el mundo”.

Finalmente, el papa Francisco exhortó a “a hacer brotar en los corazones de los hombres y mujeres de nuestro tiempo ese río de agua viva que salta hasta el cielo, para dar a Dios un culto en Espíritu y Verdad”. “Pidamos a Dios que, en cada tiempo y lugar donde María nuestra Madre nos convoque, demos testimonio de esa íntima unión, de la que sólo el Espíritu puede ser artífice”, finalizó su mensaje, impartiendo la bendición.+