El "obispo gaucho" del Uruguay, Jacinto Vera, será beato.

  • 17 de diciembre, 2022
  • Montevideo (Uruguay) (AICA)
El papa Francisco aprobó este sábado 17 de diciembre un milagro obtenido por la intercesión del venerable monseñor Jacinto Vera, primer obispo del Uruguay, lo que habilita su próxima beatificación

Los obispos del Uruguay manifestaron el 17 de diciembre, su “inmensa alegría” porque el papa Francisco aprobó el decreto de la Congregación para las Causa de los Santos que reconoce el milagro atribuido al venerable monseñor Jacinto Vera, primer obispo de Montevideo, lo que abre su camino hacia la beatificación.

Jacinto Vera, nació frente al Océano Atlántico el 3 de julio de 1813 y murió en Pan de Azúcar (Uruguay) el 6 de mayo de 1881.

“Es un motivo de júbilo y gratitud para todo el Uruguay. Misionero y apóstol de la ciudad y la campaña, recorrió tres veces todo el país. Socorrió a los heridos de las guerras civiles y encabezó misiones de paz. Padre de los pobres, amigo de sus sacerdotes, fue promotor del compromiso de los cristianos laicos en la vida de la sociedad de la época. Promovió la educación y la prensa católica. Fundó el seminario para la formación de los sacerdotes. Promovió la llegada de numerosas congregaciones religiosas a nuestras tierras, para servir a nuestra gente (vascos, salesianos, salesianas, dominicas, vicentinas, capuchinos, jesuitas, entre otros)”, se lee en la nota difundida por los obispos uruguayos al conocer la noticia. 

Los obispos destacan que el próximo beato “guió a nuestra Iglesia en tiempos difíciles, llevó la frescura de vida y de gracia del Evangelio a todos sin distinción. Al final de sus días, Don Jacinto cosechó una admiración unánime de la sociedad de su época, aún de sus mismos adversarios, como quedó plasmado en los homenajes tributados a su muerte”.  

Y concluyen los prelados uruguayos: “Su próxima beatificación nos mueve a renovar nuestro impulso misionero y nuestro deseo de servir al país y a su gente”.

Durante la audiencia concedida al cardenal Marcello Semeraro, prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, el Santo Padre autorizó al mismo Dicasterio a promulgar los decretos relativos a la próxima beatificación de alrededor de 30 otro venerables siervos de Dios.+