La superiora general de las Hermanas Basilianas visitó la Argentina

  • 2 de diciembre, 2022
  • Buenos Aires (AICA)
La madre Marcela Runcan recorrió, junto con la vicaria Emanujila Vishka, las comunidades locales y, unidas, rezaron por la paz en el mundo, especialmente en Ucrania, donde están presentes.

La madre Marcela Runcan OSBM, superiora general de las Hermanas de la Orden de San Basilio Magno, realizó una visita canónica a las comunidades de las religiosas basilianas, para conocer sus obras en la Argentina; acompañada por la hermana Emanujila Vishka OSBM, vicaria de la congregación.

En ocasión de la visita, la Madre Runcan expresó: “Estamos aquí porque, como prescribe la Iglesia, queremos celebrar la visita canónica con nuestras hermanas y conocer su misión en la provincia basiliana Cristo Rey, provincia que, desde la Argentina, ha dado muchas hermanas para servir en otros lugares de la orden como Roma, Brasil, Australia y Ucrania”.

“Queremos discernir juntas qué nos pide Dios ahora, en estos tiempos de transformaciones muy rápidas, porque somos conscientes de que vivimos en un mundo que cambia constantemente. Queremos rezar juntas por la paz en el mundo, especialmente en Ucrania donde viven y sufren esa invasión un gran número de nuestras hermanas basilianas. Desde la Orden Basiliana, nos solidarizamos con ellas para ayudarlas a ayudar en medio de tanto dolor". 

El tema de la visita está acorde con el tema del Sínodo: "Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión”. La religiosa rumana explicó que, “escuchando la voz de la Iglesia universal, queremos responder viviendo la sinodalidad desde nuestra vida consagrada. El Señor nos invita a caminar juntas, a unirnos en la oración, a unir nuestros dones, nuestros pensamientos y a ser un signo luminoso de la nueva Jerusalén entre las personas que nos conocen aquí, en la Orden y en la Iglesia”.

La visita canónica, puntualizó, “es una ocasión de encuentro y diálogo con todos los miembros de la orden, tiempo de gracia, evaluación, reflexión, oración, discernimiento y renovación, tiempo de escucha fraterna. Es un paso del Señor que visita, para traer salvación, sanación y unidad”. “Por eso, es también un tiempo para preguntarnos: ¿cuál es el sueño de Dios para mí y para nosotros?, ¿cómo podemos ser su presencia orante, sanadora y vivificante en el mundo en el que vivimos?”.

Por su parte, la hermana Vishka afirmó: “Veo que las Hermanas Basilianas en la Argentina son una presencia muy importante en la Iglesia; por su misión y servicio en la educación, en la comunicación, en la pastoral de todas las areas, en el cuidado de los niños y ancianos frágiles y vulnerables, y percibo la necesidad de que la fe -hecha testimonio de vida positiva en ellas-, atraiga nuevas vocaciones para que esta misión no se detenga”.

“Es necesario -consideró la vicaria- que más personas escuchen la voz de Dios que llama y quieran consagrar sus vidas para glorificar al Altísimo en todo tiempo, para caminar en su presencia, palpitar el amor divino por la humanidad y proclamarlo en ese generoso servicio al prójimo, hecho por amor a Dios, que hace exclamar con gozo: ¡Dios está con nosotros!”.

Por su parte, la hermana Mónica Jaciuk OSBM, invitó a rezar como lo hacía san Pablo por la comunidad de Éfeso: “Que el Dios de Cristo Jesús nuestro Señor, el Padre que está en la gloria, se les manifieste dándoles espíritu de sabiduría y de revelación, para que lo puedan conocer.  Que les ilumine la mirada interior, para apreciar la esperanza a la que han sido llamados por Dios, la herencia tan grande y gloriosa que reserva Dios a sus santos, y la fuerza incomparable con que actúa en favor de los que creemos”, concluyó.

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