Condenan al Card. Zen a una multa de 492 euros por no registrar un fondo benéfico

  • 25 de noviembre, 2022
  • Hong Kong (China) (AICA)
Un tribunal de Hong Kong condenó al cardenal de 90 años y otras cinco personalidades democráticas, por no registrar el ahora desaparecido fondo de ayuda "612 Humanitarian".

El obispo emérito de Hong Kong, cardenal Joseph Zen Ze-kiun y cinco miembros del Frente Democrático fueron juzgados y condenados hoy por la jueza Ada Yim del Tribunal de Kowloon West, por no registrar el ahora desaparecido fondo de ayuda "612 Humanitarian", con una multa de 492 euros.

El fondo en cuestión brindó asistencia financiera, legal y psicológica a las personas arrestadas durante las protestas democráticas de 2019. 

El arresto del cardenal, de 90 años y de las otras cinco personas el pasado mayo por la policía de seguridad nacional generaron críticas de algunos gobiernos occidentales porque se consideraba parte de una campaña contra los disidentes en virtud de la ley de seguridad nacional de China.

El juicio comenzó en septiembre y concluyó hoy tras un largo proceso. El 11 de mayo, la policía había detenido al cardenal y a otras cuatro personas por un cargo mucho más grave, "colusión" con fuerzas extranjeras, un delito contemplado en la draconiana ley de seguridad impuesta por Beijing en el verano de 2020.

Además del obispo emérito de la ciudad, comparecieron en el estrado la renombrada abogada Margaret Ng, la cantante y activista Denise Ho, la exdiputada de la ciudad Cyd Ho y el académico Hui Po-keung, todos ellos administradores de la organización benéfica. Por otro lado, a principios de noviembre fue detenido el activista Sze Ching-wee, secretario del Fondo 612. Hasta su cierre, hace aproximadamente un año, dicho fondo había ayudado a miles de manifestantes prodemocráticos que participaron en las protestas de 2019.

Yim dictaminó que el Fondo no podía gozar de ninguna exención de la Ley de Sociedades, ya que no era de "naturaleza pública" y había sido creado únicamente con fines benéficos. Según la magistrada, los fines de la organización eran principalmente políticos, considerando sus lazos con grupos políticos.

En contraste, la defensa había pedido que se desestimara el caso porque los administradores de los fondos no tenían derechos ni obligaciones entre sí, de modo que no constituyeron una sociedad. Además, los abogados defensores habían impugnado la constitucionalidad de la ley de sociedades, que, según ellos, restringe "de manera desproporcionada" la libertad de reunión.

La jueza Yim había propuesto modular la pena en tres categorías diferentes en función del papel de los acusados. El cardenal Zen se negó a recibir una sentencia más leve: "Todos estamos en el mismo nivel", dijo el purpurado y subrayó que no hay que hacer demasiado hincapié en su identidad religiosa.

El cardenal Zen y los otros cuatro condenados tendrán que pagar una multa de 4.000 dólares hongkoneses (casi 492 euros); para el secretario Sze, la pena es de 2.500 dólares hongkoneses (307 euros). La jueza no aplicó la pena máxima (1.681 euros).

La detención del cardenal chino -uno de los más altos dignatarios de la Iglesia católica en Asia- suscitó indignación en los países occidentales, que acusan a Pekín de no respetar las libertades prometidas a la antigua colonia británica en el momento de su retorno a China en 1997.

Los cargos contra los acusados se presentan cuando Hong Kong comenzó a tomar medidas enérgicas contra la disidencia política en los últimos años.+