El Vaticano pone en marcha una nueva política para inversiones financieras

  • 19 de julio, 2022
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Será a partir del 1 de septiembre para garantizar inversiones alineadas con las enseñanzas de la Iglesia Católica.

La Santa Sede pondrá en marcha, a partir del próximo 1 de septiembre, "una nueva política unitaria" para las inversiones financieras, con la intención de garantizar su naturaleza ética, una medida que se enmarca en la política de transparencia impulsada por el papa Francisco, se lee en una nota del Consejo de Economía, difundida a través de la Sala de Prensa de la Santa Sede.

El documento, discutido en el Consejo de Economía y con especialistas del sector, fue dirigido a los Jefes de Dicasterio de la Curia y a los Jefes de Instituciones y entidades vinculadas a la Santa Sede por el prefecto de la Secretaría de Economía, padre Juan Antonio Guerrero Alves.

El pontífice ya instituyó en junio pasado un Comité para las Inversiones, un organismo incluido en su Constitución Apostólica y dirigido a "garantizar la naturaleza ética de las inversiones inmobiliarias de la Santa Sede", que contrasta con las irregularidades financieras por la compraventa de un edificio de lujo en Londres que actualmente se juzgan en el Vaticano.

"La nueva política de inversiones tiene por objeto garantizar que las inversiones se destinen a contribuir a un mundo más justo y sostenible", así como "proteger el valor real del patrimonio de la Santa Sede generando un rendimiento suficiente para contribuir de forma sostenible a la financiación de sus actividades; y estén alineadas con las enseñanzas de la Iglesia católica, con exclusiones específicas de inversiones financieras que contradigan sus principios fundamentales, como la santidad de la vida o la dignidad del ser humano o el bien común", indicó el Vaticano.

Por esta razón, prosigue el comunicado, es importante que dichas inversiones "se dirijan a actividades financieras de carácter productivo, excluyendo las de carácter especulativo y, sobre todo, se guíen por el principio de que la elección de invertir en un lugar y no en otro, en un sector productivo y no en otro, es siempre una elección moral y cultural".

La política de inversión -añade la Secretaría para la Economía- fue aprobada ad experimentum por cinco años y entrará en vigor el próximo 1 de septiembre, con un período de moratoria para adaptarse a los criterios propuestos.

En el comunicado también se explica cómo se aplicará la nueva política de inversión: "Las instituciones curiales -dice la nota- deberán confiar sus inversiones financieras a la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA), transfiriendo su propia liquidez para ser invertida -o sus propios valores depositados en bancos extranjeros o en el propio Instituto para las Obras de Religión (IOR)- a la cuenta de la APSA habilitada en el IOR a tal efecto".

La APSA, como institución que administra el patrimonio de la Santa Sede, establecerá un fondo único para la Santa Sede en el que desembocarán las inversiones en los distintos instrumentos financieros, y tendrá una cuenta para cada institución, elaborando el balance y pagando los rendimientos".

Por último, el comunicado no deja de referirse al nuevo Comité para las Inversiones, instituido por la Praedicate Evangelium

Este Comité, destaca, "realizará -a través de la APSA- las oportunas consultas encaminadas a la aplicación de la estrategia de inversión y evaluará la idoneidad de las opciones, con especial atención a la conformidad de las inversiones realizadas con los principios de la Doctrina Social de la Iglesia, así como los parámetros de rentabilidad y riesgo según la Política de Inversión".+