La reconciliación entre los cristianos contribuye a la pacificación de los pueblos

  • 30 de junio, 2022
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
El papa Francisco recibió este jueves 30 de junio a una delegación del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla, que llegó a Roma para la celebración de los santos Pedro y Pablo

“La reconciliación entre los cristianos separados, como contribución a la pacificación de los pueblos en conflicto, es hoy más actual que nunca, mientras el mundo está consternado por una cruel e insensata agresión bélica, en la que muchos cristianos luchan entre sí”, afirmó el papa Francisco al recibir a una delegación del Patriarcado Ecuménico, con motivo de la solemnidad de san Pedro y san Pablo.

El pontífice señaló que "ante el escándalo de la guerra, no hay ninguna consideración sino que hay que llorar, ayudar y convertir”. “Hay que llorar las víctimas y tanta sangre derramada, la muerte de tantas personas inocentes, los traumas de las familias, de las ciudades, de todo un pueblo”, explicó

“Cuánto sufrimiento -dijo- en quienes perdieron a sus seres queridos y se ven obligados a abandonar su propio hogar y patria! Entonces hay una necesidad de ayudar a estos hermanos: es una llamada a la caridad que, como cristianos, estamos obligados a ejercer hacia el pobre y herido Jesús migrante. Pero también es necesario convertirse para comprender que las conquistas armadas, las expansiones y los imperialismos nada tienen que ver con el Reino que Jesús anunció, con el Señor de la Pascua que en Getsemaní pidió a los discípulos que renunciaran a la violencia, que depusieran la espada en su lugar 'porque todos los que toman la espada morirán por la espada'; y truncando toda objeción dijo: '¡Basta!'”. 

Francisco agradeció al “querido hermano Bartolomé” por haber enviado la delegación: “Nuestras Iglesias mantienen un diálogo fraterno y se comprometen de manera convencida e irreversible en el camino hacia el restablecimiento de la plena comunión”.

“La búsqueda de la unidad de los cristianos, por tanto, no es sólo una cuestión dentro de las Iglesias. Es una condición esencial para la realización de una auténtica fraternidad universal, que se manifiesta en la justicia y la solidaridad hacia todos”, subrayó el Papa.

Caminar juntos como hermanos
En este sentido, concluyó el Pontífice, “un signo de esperanza, en el camino hacia el restablecimiento de la plena comunión, proviene de la reunión del Comité de Coordinación de la Comisión Mixta Internacional para el Diálogo Teológico entre la Iglesia Católica y la Iglesia Ortodoxa", suspendido durante dos años debido a la pandemia.

La esperanza es "que el diálogo teológico progrese promoviendo una nueva mentalidad que, conscientes de los errores del pasado, nos lleve a mirar cada vez más juntos el presente y el futuro, sin dejarnos atrapar por los prejuicios de otros tiempos".

"No nos conformemos con una "diplomacia eclesiástica" para quedarnos amablemente en nuestras propias ideas, sino caminemos juntos como hermanos: oremos unos por otros, trabajemos unos con otros, apoyémonos unos a otros mirando a Jesús y su Evangelio", dijo el Papa a la delegación del Patriarcado Ecuménico.+