Mons. Torres: Tenemos que dejar que Jesús entre a nuestra casa, a nuestro corazón

  • 20 de abril, 2022
  • Córdoba (AICA)
El obispo auxiliar de Córdoba, monseñor Pedro Torres, presidió este sábado la Vigilia Pascual en la catedral Nuestra Señora de la Asunción.

Con una celebración presidida por el obispo auxiliar de Córdoba, monseñor Pedro Torres, en la catedral Nuestra Señora de la Asunción, la comunidad participó el Sábado Santo de la Solemne Vigilia Pascual.

En su homilía, el obispo afirmó: "Esta noche la muerte ha sido vencida, el pecado ha sido vencido". Y añadió: "La muerte clavó su aguijón en Jesús, pero en Jesús murió la muerte. Él es el único que tiene palabras de vida eterna".

"Jesús está vivo y está salvando, y quiere entrar a nuestro corazón. Quiere que lo anunciemos, que anunciemos lo que se llama el kerygma. Jesucristo ha resucitado, lo dirá Pedro mañana: ‘Ese que ustedes mataron está vivo’. Lo dice Pablo en la lectura de hoy. En el bautismo hemos muerto con Cristo pero hemos resucitado con Él", señaló. "Hoy nos pregunta el Señor: ‘¿Por qué buscan entre los muertos al que está vivo?’ ¿Por qué buscamos la alegría donde no está?”, planteó.

"Las grandes protagonistas de esta noche son las mujeres, ellas que fueron al sepulcro y llevaban perfumes, no iban preparadas para encontrar a Jesús vivo, pero encontraron removida la piedra. Una palabra que a mí me ha hecho rezar estos días: La puerta del sepulcro estaba abierta. La piedra había sido removida. Ese detalle lo han tenido presente todos los evangelistas, de hecho se preguntaban hasta los romanos cómo hicieron para mover la piedra", destacó el prelado.

En ese sentido, llamó a reflexionar: "¿Cuál piedra tiene que remover Jesús para entrar a mi corazón? A veces son piedras pesadas, nos hemos encerrado, nos hemos enclaustrado. Cuánto mal le ha hecho el encierro el año pasado a tanta gente, no estamos vivos para estar encerrados", advirtió.

"Esta noche es toda una noche bautismal, esta noche vamos a renovar el compromiso bautismal. A veces nos quejamos de pobreza, rumiamos nuestras tristezas y estamos al lado de un inmenso tesoro. El tesoro es nuestro Bautismo, el Señor ha instalado una fuente de agua viva en nuestro corazón. El Bautismo es la puerta de la vida cristiana, es el encuentro de Jesús que prolonga su encarnación en cada sacramento, pero particularmente en el Bautismo, la Confirmación, la Eucaristía", afirmó.

"El signo de que Dios nos ama es Jesucristo, el Dios hecho hombre, que nos amó hasta el extremo y nos llamó amigos. Pero los sacramentos no son una bendición más, son la prolongación de la encarnación de Jesús en la historia. En cada sacramento Jesús me toca.".

"Esta noche vamos a renovar la fe, pero tenemos que dejarnos tocar por Jesús, tenemos que dejar que Jesús, que está vivo, entre a nuestra casa, a nuestro corazón. Su corazón traspasado quiere traspasarnos a nosotros con su amor", aseguró monseñor Torres.

"Hoy Jesús tiene un mensaje para cada uno, quiere regalarnos su presencia, quiere sanarnos, quiere vivificarnos, quiere mostrarnos de la fuente de la verdadera Eucaristía, la perla preciosa, el tesoro enterrado. Ser cristiano es fascinarse con Jesús, enamorarse de Jesús, conocer a Jesús, seguir a Jesús", sostuvo.+